Estrategia empresarial

Pimec se reúne con Puigdemont para tratar de evitar la reducción de la jornada laboral

El presidente de la patronal inicia en Waterloo una ronda de encuentros políticos ante lo que califica de "contrasentido", un "incremento insostenible de los costes" y un "fracaso del diálogo social estatal"

Díaz anuncia que el Consejo de Ministros aprueba el martes el proyecto de ley de reducción de la jornada laboral

Antoni Cañete, president de Pimec, en una foto de archivo.

Antoni Cañete, president de Pimec, en una foto de archivo.

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Pimec cree que el diálogo social ha fracasado a nivel estatal, así que ha empezado una campaña para intentar resolver ella misma el asunto. Sobre todo visto que la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, tiene intención de llevar al Consejo de Ministros del próximo martes el proyecto de ley de reducción de la jornada laboral, aunque no cuente con el apoyo de la principal patronal española, la CEOE. Ésta, por cierto, calificó ayer la decisión de "oportunismo político". Ante este panorama, la organización empresarial catalana ha decidido empezar a urdir su propia campaña para conseguir que la norma no prospere.

La estrategia es reunirse con varios líderes políticos para trasladar "la postura crítica del tejido de pequeñas y medianas empresas", empezando por Carles Puigdemont. El presidente de Pimec, Antonio Cañete, ha viajado este viernes a Waterloo para mantener esta primera reunión.

Según un comunicado de esta patronal centrada en las pymes, Cañete ha manifestado al líder de Junts "la profunda preocupación de las pymes" ante la propuesta, un texto que cree "desconectado de la realidad empresarial y de las necesidades del país". Se trata de un mercado, dice, que presenta déficits claros en el mercado de trabajo.

Incremento de los costes

Su principal preocupación es que la medida suponga un "incremento inasumible de los costes", que afectará especialmente a las empresas de menor tamaño. Lo dice metiendo en el mismo saco al incremento de las sanciones vinculadas al registro horario o a las obligaciones relativas a la desconexión digital. "A todo esto se añade la falta de mecanismos de flexibilidad en la gestión de la jornada, como la distribución irregular o las horas extraordinarias, lo que convierte la medida en un contrasentido", agrega este comunicado.

"Todo esto se produce en un contexto económico marcado por una elevada incertidumbre y tensión internacional, con una guerra arancelaria abierta que puede afectar gravemente la competitividad de las empresas y distorsiona las cadenas de suministro, lo que agrava aún más la situación de las pymes", concluye el presidente de Pimec.

La demanda y propuesta, en este sentido, es que la cuestión se trate de forma global. Es decir, que se instauren medidas para reducir el absentismo laboral, mejorar la productividad o fomentar la formación y capacitación profesional. Esto, a su juicio, mejoraría la competitividad empresarial y, consecuentemente, el tiempo de trabajo.