Industria
¿Por qué será tan influyente la fábrica de cátodos para baterías eléctricas de Sallent?
ICL y Dynanonic quieren abrir en Sallent la primera fábrica de cátodos para baterías eléctricas en Catalunya

SALLENT . MINA DE ICL . ICL I DYNANONIC VOLEN OBRIR A SALLENT LA PRIMERA FABRICA DE CATODES PER A BATERIES ELECTRIQUES A CATALUNYA / Oscar Bayona
Lo dice una voz autorizada : "Los fabricantes de equipos de automoción originales están incrementando el uso de LFP para mejorar la competitividad económica de los vehículos eléctricos". Se trata de Isaac Chan, socio de la división especializada en este sector de la prestigiosa consultora estratégica Roland Berger. Y las siglas de las que habla, LFP, serán en breve muy populares en Sallent, las comarcas interiores y el conjunto de Catalunya.
De hecho , también Sallent debería convertirse en un topónimo que sonara familiar a empresas, instituciones y particulares de toda Europa si culminan con éxito los planes de ICL y Shenzhen Dynanonic Co., ltd. de abrir en esta población del Bages la primera fábrica de cátodos para baterías eléctricas del país. La automoción es ahora mismo la segunda industria con más volumen en Catalunya, ya que aproximadamente genera el 10% del producto interior bruto (PIB).
Unas 10.000 compañías de este sector emplean a 143.000 personas. Las baterías de litio-ferrofosfato, o sea, LFP, son una modalidad recargable que se ha vuelto fundamental en la automoción y la energía sostenibles. Esta es la principal explicación de la relevancia del proyecto de ICL y Dynanonic. El cátodo es el electrodo positivo donde se produce la reacción que permite que la batería libere energía durante la descarga.
Cuando se carga la batería , los electrones se desplazan hacia el cátodo a través de un circuito externo, y los iones de litio se guardan en la estructura del cátodo. En el ánodo, esto es, el electrodo negativo, hay otra reacción, en la que los electrones se liberan y viajan hacia el cátodo por el circuito externo , para completar el proceso.
Cátodos como los que ICL y Dynanonic quieren fabricar en Sallent son utilizados en baterías de iones de litio que ofrecen una alta seguridad, una vida útil extensa y, además, un coste bajo. Se aplican allí donde la seguridad y la estabilidad son más importantes que la máxima capacidad para almacenar energía. Este es el caso de los vehículos eléctricos (incluidas las bicicletas) o los sistemas diseñados para acumular energía solar y eólica. Esta es una tecnología clave en el presente y lo será aún más en el futuro, ya que resulta más ecológica en el mercado de las baterías recargables. Contribuye a generar un modelo de energía limpia que, en última instancia, es más accesible y viable que la mayoría de los actuales.
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