Industria textil

El espíritu bursátil de Mango será el que determine la sucesión de Andic

El consejo de administración decidirá quién ocupa la figura de presidente no ejecutivo una vez se sepa quién hereda las acciones del empresario

¿Qué pasará, a partir de ahora, con Mango? Lo que se sabe y lo que no del futuro de la cadena textil catalana

El Campus de Mango en Palau-solità i Plegamans, durante el acto interno de homenaje a Isak Andic

El Campus de Mango en Palau-solità i Plegamans, durante el acto interno de homenaje a Isak Andic / Mango

Paula Clemente

Paula Clemente

Barcelona
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Se lo planteó hace muchísimos años, pero el consejo de alguien en quien confiaba enormemente le decidió a alejarse de la bolsa. Las exigencias, una vez te conviertes en empresa cotizada, son muchas y muy altas –cuenta una fuente implicada en estos entornos–, y, en realidad, Isak Andic no necesitaba una de las grandes promesas de los parqués: el dinero. Lo que sí quiso adoptar el fundador de Mango para la firma fue el espíritu de empresa bursátil. Y será precisamente eso lo que determine su sucesión.

Se ha especulado mucho estos días posteriores a su fallecimiento tras un accidente de senderismo en Collbató qué es lo que ocurrirá, ahora, en la compañía. La voluntad del empresario estaba más que clara, pues fue transparente en público sobre ella. Él quería que sus hijos (la familia en general) fueran accionistas de Mango y que la propiedad se abriera lo mínimo posible, pero que fuera un equipo externo el que tomara las decisiones ejecutivas. A poder ser, bajo el mando de Toni Ruiz, actual consejero delegado y directivo designado por el propio Andic como una especie de sucesor al frente del negocio.

La gran incógnita es qué papel jugarán sus tres hijos y cual de los tres (si es que acaba siendo uno de ellos) ocupa el lugar de su padre como presidente no ejecutivo del grupo. Este es un cargo que, en realidad, no tiene nada que ver con la gestión de la compañía, pero Isak Andic lo empleaba para marcar lo que quería para Mango.

Posibles escenarios

Dentro de la compañía son prudentes al respecto y dejan claro que no tienen prisa por resolver este vacío, una vez ha quedado claro que la familia reafirma su apoyo a Toni Ruiz como piloto de este barco. Será él, de hecho, quien asuma las funciones propias del presidente mientras se decide quien ostenta el cargo definitivamente. En cualquier caso, sí hay ciertos escenarios previsibles.

El más evidente, que una vez se lea el testamento y se sepa a quién hace heredero de su 95% de Mango (el 5% restante lo tiene Ruiz, primera y única vez que Andic abrió su capital a alguien ajeno a la familia), este o estos tendrán que elegir a alguien que les represente en las decisiones del consejo de administración. Este órgano, que aún no ha cumplido los 20 años de vida, se creó precisamente para "profesionalizar" la gestión de la compañía.

Por su vinculación con la empresa y experiencia dentro y a los mandos de la misma, la teoría más extendida es que será Jonathan Andic, el primogénito, quien asuma esta responsabilidad. Pero, tal como apuntan fuentes jurídicas consultadas, en realidad la familia también podría contratar a una persona ajena a ellos para ocupar esa silla y que sea un profesional externo el que vele por sus intereses en Mango.

Presidente por mayoría

Hagan lo que hagan, la decisión es sumamente importante, porque, precisamente por el espíritu bursátil del que se impregnó hace años a Mango, los estatutos de este consejo de administración tienen estipulado que el presidente se elija por mayoría absoluta. Es decir, que la nueva incorporación, los cuatro ejecutivos internos que tienen voz y voto en el consejo de administración (Toni Ruiz, consejero delegado; Jonathan Andic, hijo y director de la línea Mango Man; Daniel López, director de expansión y franquicias; y Margarita Salvans, directora financiera) y los cuatro consejeros independientes (Jordi Canals, Jordi Constans, Jorge Lucaya y Marc Puig) tienen que estar mayoritariamente de acuerdo en nombrar al futuro presidente de este consejo. Se necesitarían cinco votos a favor, para ello.

"Nadie tiene prevalencia de voto", confirma una fuente cercana a la empresa. Lo que, a la práctica, significa que Jonathan Andic no tiene por qué partir de ventaja.

Parece, por supuesto, la opción más obvia. Jonathan Andic entró en Mango con 24 años (ahora tiene 43) y ha estado involucrado en el proceso de creación, el diseño de colecciones y la gestión de equipos. Fue quien lanzó la línea de ropa de hombre (que sigue dirigiendo actualmente) y llegó a ser presidente adjunto. Su padre incluso le fue cediendo progresivamente el poder para dar tranquilamente un paso al lado. Sin embargo, el movimiento no salió del todo bien y tuvo que volver de su breve retiro para encauzar a Mango.

Es por este bache económico –y porque se habla de una relación algo tensa entre ambos– que la posibilidad de que Jonathan Andic releve a Isac Andik en lo más alto de la pirámide de Mango genera cierta expectación. Pero, una fuente cercana al fundador de la compañía en lo personal rompe una lanza a favor de Jonathan. "Isak quería muchísimo a sus hijos, a los tres", aclara sin dudarlo. "Entonces [cuando el primogénito de Isak Andic tomó las riendas de Mango], Jonathan era muy joven, quizás era demasiado pronto para él. Puede que ahora...".

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