Automoción

Bruselas aplicará desde este jueves aranceles a los coches eléctricos hechos en China

La UE confirma la entrada en vigor del aumento de impuestos por cinco años a todos los vehículos de baterías producidos en el país asiático al fracasar por ahora un acuerdo bilateral

Coches chinos

Coches chinos / ACEA

Xavier Pérez

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Sin acuerdo bilateral y con el mercado del coche eléctrico en pleno estancamiento, la Unión Europea dará este jueves la puntilla a los coches de baterías procedentes del China. Esta tarde se ha comunicado desde Bruselas que, "una vez concluida la investigación anti-subisidios, se imponen unos derechos compensatorios definitivos a las importaciones de vehículos eléctricos de batería (BEV) procedentes de China durante un periodo de cinco años. Como ya se informó, la investigación concluyó que la cadena de valor de los BEV en China se beneficia de subvenciones desleales que amenazan con causar un perjuicio económico a los productores de BEV de la UE. En consecuencia, los derechos entrarán en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial".

Con esta confirmación, los fabricantes de automóviles chinos (y algunos europeos que producen modelos en China) deberán asumir un sobrecoste en el precio aplicado a sus modelos. Esta situación obligará a las marcas a repercutir parte (o la totalidad) de ese impuesto en el consumidor. La intención de la Unión Europea es salvaguardar la industrial local, aunque es probable que la medida no alcance su objetivo ya que los fabricantes europeos están entrando en recesión en el tema del coche eléctrico (el anuncio de posibles cierres de plantas de Volkswagen así lo atestiguan). Y todo en un momento en el que el impulso del coche de baterías no está siendo el esperado. La medida afecta a coches 100% eléctricos y no a híbridos enchufables ni modelos de combustión, que son los que últimamente están empezando a traer a Europa las marcas chinas.

Cupra deberá asumir el coste de los aranceles del Tavascan (se fabrica en Hefei), los modelos de SAIC costarán un 35,3% más, los de Geely un 18,8%, BYD un 17% y Tesla un 7,9%

Salvar al Cupra Tavascan

En la nota remitida por la Unión Europea se advierte que tanto los dirigentes europeos como los chinos siguen trabajando para buscar una solución, pero eso no evitará que al menos en este tramo final de año se apliquen los aranceles. "La UE y China siguen trabajando para encontrar soluciones alternativas, compatibles con la OMC, que sean eficaces para abordar los problemas detectados por la investigación. La Comisión también sigue abierta a negociar compromisos de precios con exportadores individuales, tal como permiten las normas de la UE y de la OMC", unas negociaciones en las que Cupra (de Seat S.A.) deberá poner la carne en el asador para salvar de aranceles a su nuevo SUV, el Cupra Tavascan.

Desde la Unión Europea se define que "a partir de la entrada en vigor de las medidas, los productores exportadores chinos incluidos en la muestra estarán sujetos a los siguientes derechos compensatorios: BYD: 17,0%; Geely: 18,8; SAIC: 35,3%. Las demás empresas que cooperaron estarán sujetas a un derecho del 20,7%. Tras una solicitud justificada de examen individual, se asignará a Tesla un derecho del 7,8%. Todas las demás empresas que no cooperaron en la investigación tendrán un derecho compensatorio del 35,3%".

La investigación fue anunciada por Ursula von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea, el 13 de septiembre de 2023 durante su discurso sobre el Estado de la Unión Europea (SOTEU). Esta decisión se basó en pruebas, según la UE, "cada vez más numerosas sobre el reciente y rápido aumento de las exportaciones a bajo precio de vehículos eléctricos procedentes de China a la UE. La Comisión siguió procedimientos legales estrictos en consonancia con las normas de la UE y de la OMC, permitiendo a todas las partes interesadas, incluidos el Gobierno chino y las empresas/exportadores, presentar observaciones, pruebas y argumentos", confirman desde Bruselas.