Repsol denuncia que la entrada ilegal de diésel ruso en Europa y España está detrás de los bajos precios

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha denunciado este jueves que el diésel ruso sigue entrando en España y en Europa, pese a las sanciones que le impiden hacerlo, al entrar desde terceros países. “El diésel ruso sigue estando en el mercado. Sigue estando en el mercado europeo. Y sigue estando en el mercado español. Hay de diferentes destinos, hacia Turquía o hacia el norte de África, y otros, pero este diésel (ruso) sigue llegando a la Unión Europea”, ha advertido Imaz al ser preguntado por el motivo de los bajos precios de este producto en las últimas semanas.

El 40% de las importaciones comunitarias de diésel provenían de Rusia antes de la guerra. Pero en mayo del año pasado, la Comisión Europea anunció el veto a la entrada de diésel desde Rusia, con efectos a partir de febrero de este año, para evitar contribuir a la financiación de la guerra de Ucrania. Pero lejos de producirse un freno de las importaciones, según Imaz, el diésel ruso sigue llegando al continente. “Espero que las autoridades europeas sean firmes con las sanciones para los productos rusos. Primero porque esto forma parte de lo que está haciendo Europa para presionar a Rusia para frenar la guerra. Y segundo porque es lo justo, pues algunas compañías sí que estamos cumpliendo con las sanciones porque estamos convencidas por una cuestión moral, pero también porque hay un régimen de sanciones”, ha insistido Imaz, quien en octubre auguraba "altos precios del diésel" en los meses siguientes debido a la escasez que podría generar la falta de diésel ruso y la recuperación de la demanda China.

Además de por las importaciones de Rusia, Imaz ha señalado otros cuatro motivos para justificar los precios bajos como es el final del invierno y la llegada de la primavera cuando los precios suelen ser más bajos; el acopio de este producto que se hizo antes de la entrada del veto ruso y que, según ha afirmado, incrementó de forma "artificial" los precios en los últimos meses de 2022, o los bajos precios de gas, una materia prima que compite en algunas regiones con el diésel para las calefacciones. En este sentido, ha confiado en que los precios del gas retomen el vuelo en los próximos meses, según los países centroeuropeos tengan que rellenar sus almacenamientos. También ha aludido a las huelgas en las refinerías francesas. No obstante, ha insistido en su confianza de que "la recuperación de China y las dificultades de diésel en Europa contribuirán positivamente a final de año

Gana un 20% menos

Imaz ha hecho estas declaraciones durante la conferencia de analistas para presentar los resultados del primer trimestre, periodo en el que la compañía ganó 1.112 millones de euros, un 20% menos que un año antes, por los menores precios del petróleo durante el periodo. El crudo, igual que otras materias primas como el gas, se vio lastrado por las perspectivas económicas en Europa y Estados Unidos ante las dificultades para frenar la inflación. Así, el barril de Brent redujo su precio un 21% (hasta los 81 dólares) en estos tres meses. El área de exploración y producción fue la más penalizada, con un resultado ajustado de este negocio de 474 millones de euros, unos 257 millones menos que en el mismo periodo de 2022.

Las otras tres patas del negocio de la petrolera (industrial, comercial y generación) mejoraron sus números respecto a 2022. En el ámbito industrial, el resultado ajustado ascendió a 1.279 millones de euros, unos 1.044 millones de euros más que en el mismo trimestre del 2022, debido principalmente a unos mayores resultados en los negocios de refino (proceso en el que el crudo se convierte en producto como diésel, gasolina o queroseno) y a unas tasas de utilización superiores, que compensaron de forma parcial unos menores resultados en la parte química.

En el apartado comercial, el resultado ajustado ascendió a 174 millones de euros, 79 millones de euros superior al del mismo trimestre del 2022, con un alza del 12% de las ventas en las gasolineras. El descuento ofrecido por la compañía fue compensado por una mayor cuota de mercado y por las iniciativas de fidelización puestas en marcha. Repsol cuenta con 6 millones de usuarios en la aplicación Waylet y en abril lanzó un nuevo programa (Energías Conectadas) que agrupa todas sus ofertas energéticas (combustible, electricidad, calefacción, solar o movilidad eléctrica) en una sola. En Generación baja en Carbono, que incluye su negocio renovable, el resultado ajustado ascendió a 34 millones de euros, 6 millones de euros superiores a los del mismo periodo de 2022.

El resultado de este trimestre no se ve significativamente afectado por el impuesto del Gobierno que grava el 1,2% de las ventas del año pasado porque la compañía lo provisionó en sus cuentas del año anterior. Repsol fue la compañía más afectada dentro del conjunto del sector energético con un pago anual de unos 450 millones de euros por esta tasa.

Redujo un 85% su deuda

La compañía redujo en 1.376 millones de euros su deuda neta en el último trimestre con la venta del 25% de su negocio de exploración y producción, hasta situarla en 880 millones de euros al final del periodo. En el mismo periodo de 2022 la deuda era de 5.900 millones de euros, lo que supone una reducción del 85%. Por otra parte, distribuirá un dividendo complementario de 0,35 euros por acción en julio tras su aprobación por parte de la Junta General, cuya celebración está prevista para el próximo 25 de mayo, que se suma a la misma cantidad repartida en enero. Con estos pagos, en 2023 se incrementará un 11% la remuneración a los accionistas, hasta los 0,70 euros brutos por acción, con lo que se adelanta el objetivo previsto por el Plan Estratégico para el año 2024. 

A este dividendo en efectivo se añadirá, antes del final de julio, una nueva reducción de capital de 50 millones de acciones propuesta por el Consejo a la próxima Junta General, tras haberse reducido el capital en 200 millones de acciones en el ejercicio 2022, cantidad prevista para todo el periodo 2021-2025. Para cumplir con esta nueva meta, el 6 de marzo comenzó un nuevo programa de recompra para adquirir un máximo de 35 millones de acciones.