Alimentación

Una Navidad mejor de lo esperado impulsa las ventas de cava hasta los 2.100 millones de euros en 2022

La Denominación de Origen supera su previsión de ventas con casi 250 millones de botellas vendidas a lo largo del año y se prepara para un 2023 también bueno pese a la incertidumbre

Cavas

Cavas / Cedida

Paula Clemente

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Buenas noticias para los productores de cava: el consumo va al alza. El sector cierra 2022 con cifras récord de facturación y ventas, y no hay nada que les haga pensar que el mercado se va a enfriar en 2023. En total, la Denominación de Origen (D. O.) Cava vendió 249 millones de botellas el año pasado, un volumen ligeramente superior a lo que se preveía gracias a una campaña de Navidad mejor de lo esperado tras un tercer trimestre de cierto parón de la actividad.

De este modo, si el presidente de la D. O. Cava, Javier Pagés, se atrevía en septiembre a esperar un 3% de incremento de las ventas en relación al año anterior, finalmente la gráfica indica un avance del 4,5%. Esto se debe en buena medida al desempeño del mercado nacional, que ha comprado un 13% más de cava. En cambio, las ventas en el extranjero avanzan solo un tímido 1%, esencialmente porque hay países en que la actividad no ha crecido o incluso se ha resentido. El ránking, en cualquier caso, lo siguen liderando Alemania, Estados Unidos, Bélgica y Reino Unido, con Suecia por primera vez en quinto lugar gracias a un acelerón de las ventas del 35%.  

Por lo tanto, la lectura es sobradamente positiva. Primero, porque según los cálculos de este portavoz, este nivel de ventas equivale a un volumen de negocio de 2.192 millones de euros, un 15% más que el año previo. En un contexto muy complejo por el incremento de costes, la inflación y los tambores de crisis -ha analizado Pagés este jueves-, “hemos sacado resultados muy buenos, lo que le da mucho más mérito”.

En hostelería, por ejemplo, el consumo es prácticamente un tercio superior al del año previo, y en la compra de alimentación en general, otro 10,5%. Aunque aquí, el dato que destaca Pagés como más meritorio es ser la única categoría que crece en volúmenes, frente a un Champagne, un Granvas y otros espumosos que retroceden.

Revalorizar marca

Además, los datos de cierre de año confirman que la venta de las categorías superiores de cava también van hacia arriba, lo que les supone confirmar que están en el camino correcto para lograr uno de sus grandes objetivos de los últimos años: revalorizar su marca. “El nivel cualitativo lo tenemos, pero tenemos que ir escalando y posicionándonos donde nuestros vinos merecen, que es más arriba aún”, ha sintetizado el presidente de la D. O. Cava.

En cuanto al año que viene, optimismo prudente. “Si el año pasado fue difícil y lo hemos sacado bien, no veo porque este no va a salir bien”, ha sostenido Pagés, tras reconocer que en el entorno hay condiciones volátiles, factores que justifican cierto nivel de incertidumbre y que la “amenaza” de la sequía sigue ahí. “Tendremos que seguir pensando inteligentemente como salir adelante”, ha resuelto.

Lo que no parece que vaya a haber de ningún modo es un acercamiento con Corpinnat, Classic Penedès y su intención de crear una nueva Denominación de Origen de vinos espumosos al margen del cava. “Me parece más hablar por hablar que una cosa seria”, ha respondido Pagés a preguntas de la prensa, que ha resumido su sentir diciendo que no entiende muy bien lo que se persigue: “¿Cómo alguien puede pensar en crear una D. O., dentro de otra D.O., en el mismo territorio y con el mismo método para hacer espumosos?”, ha zanjado.