Las 5 claves de los datos del paro de febrero del 2023

Empleo: Casi medio millón más de ocupados

El empleo arrancó el 2022 con grandes perspectivas, lanzado tras el socavón del covid. El inicio de las hostilidades provocó cortes en los suministros y aceleró un proceso de inflación que doce meses después sigue tensionando las cuentas empresariales y ahogando los bolsillos de los trabajadores. Pese a la cortina de incertidumbre y las turbulencias, el empleo ha aguantado sorprendentemente bien durante este año. El saldo de afiliados a la Seguridad Social es de casi medio millón más, hasta un total de 20,17 millones de trabajadores en activo. Nunca antes en un febrero había habido tanta gente activa a la vez en el mercado laboral.

Ese balance interanual de 475.000 ocupados ubica el ritmo de crecimiento de la ocupación en España a niveles de salida de la Gran Recesión. Es decir, realizando un símil automovilístico, el coche está en movimiento, a velocidad media-baja y actualmente acelerando. Durante los próximos meses habrá que ver si se confirma esa tendencia a agarrar velocidad y volver a los ritmos de despegue del empleo experimentados durante el ciclo 2016-2019 o se remitirá la tendencia y se desacelerará.

Paro: Sigue siendo la asignatura pendiente

El paro, en términos puramente estadísticos, ha disminuido en 200.669 personas en el último año, hasta un total de 2,91 millones de personas desempleadas. Es el nivel más bajo de paro en España desde 2008, justo cuando estalló las burbujas financiera e inmobiliaria. Y pese a las recientes inclemencias, las listas del Sepe han logrado mantenerse por debajo de la simbólica cifra de los tres millones. No obstante y pese a la inercia positiva, sigue siendo la mayor tasa de desempleo de toda la Unión Europea. Y es que España logra crear más empleos que parados recoloca.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que el paro registrado un mal indicador para medir realmente la tasa de desempleo de un país. Ya que este es un registro administrativo y hay gente que no está dada de alta, en tanto que el único incentivo a apuntarse al Sepe y superar los trámites es poder cobrar una prestación o subsidio. Y aquellos parados que no tienen derecho a ello, no suelen apuntarse y no aparecen en esta estadística.

En este sentido, el nivel de protección actual de los parados es -comparativamente- alto. Actualmente siete de cada 10 parados cobra prestación o subsidio, la proporción más alta desde 2012. El plazo medio de reconocimiento de una prestación o subsidio es actualmente de 1,95 días, según los registros oficiales del Sepe.

Más estabilidad con la reforma laboral

La reforma laboral ha ido desplegando sus efectos en paralelo a la ofensiva lanzada por el ejército ruso. Y ha dejado registros sin precedentes en la estadística disponible. Para empezar, el número de contratos firmados se ha desplomado, fruto de las limitaciones a la contratación temporal . Entre febrero del 2022 y febrero del 2023 en España se firmaron un total de 18,9 millones de contratos, cuando en el mismo periodo de 2019 se firmaron 44,7 millones, es decir, la contratación ha caído a la mitad. Principalmente por el auge de la indefinida, que en el último año casi se ha doblado, pasando de los 7,8 millones de contratos este año a los 4,3 millones en 2019.

Que se firmen muchos menos contratos temporales que antes de la reforma tiene una repercusión directa en el porcentaje de trabajadores que operan con uno de estos contratos. Actualmente el 14% de los asalariados es eventual, un mínimo histórico, según ha destacado la Seguridad Social en su nota de prensa, ya que antes de la reforma la media era del 30%. Los jóvenes son uno de los colectivos más beneficiados y es que la temporalidad ha retrocedido 30 puntos entre los menores de 30 años, pasando del 53% al 23%.

Alerta entre el colectivo de autónomos

El empleo autónomo no atraviesa horas boyantes y por primera vez desde 2013 el colectivo ha entrado en contracción. Lleva desde enero-febrero en números rojos. Actualmente hay menos trabajadores por cuenta propia en España que hace un año, algo que no pasaba desde la Gran Recesión. El retroceso es mínimo, del 0,1%, pero hace saltar una primera alarma. Según los datos de enero, hay 3,3 millones de afiliados al RETA dados de alta.

Este dato negativo coincide con la entrada en vigor del nuevo sistema de cuotas, que pasa a gravar a los autónomos en función de sus rendimientos netos. Habrá que ver durante los meses si el retroceso obedece a un ajuste coyuntural y una reacción más psicológica que económica a la novedad legislativa o si esta está ahuyentando a una parte del colectivo, que al no poder aferrarse a la cuota mínima prefiere darse de baja.

Catalunya vuelve a superar los 3,6 millones de ocupados

Catalunya dejó este pasado mes de febrero buenos registros en términos de empleo. Justo un año después de que Vladímir Putin ordenara a su ejército invadir Ucrania, en territorio catalán hay un total de 3,6 millones de trabajadores en activo. Unos 25.603 más que el mes pasado y 105.000 más que antes de la invasión rusa. Y, en términos de paro, mismo guion que el conjunto de España. Este baja -en 20.372 personas-, pero no tan rápido como sube el empleo y sigue en niveles altos. Actualmente hay 351.288 catalanes alistados en el Sepe, cuando en 2008 había 290.912.

En este último mes Catalunya ha sido la autonomía que tiró del empleo en el segundo mes del año. Fue la que más trabajadores sumó en términos absolutos, creando el doble que la Comunidad de Madrid y ubicándose segunda, tras las Islas Baleares, en crecimiento del empleo en términos relativos.