Tributación

El índice de competitividad fiscal sitúa a España en el quinto país por la cola de la OCDE

El indicador que elabora la Tax Foundation en Estados Unidos penaliza las últimas subidas de impuestos por el Gobierno de coalición

director general iee gregorio izquierdo presidente organismo ini

director general iee gregorio izquierdo presidente organismo ini / IEE

Rosa María Sánchez

Rosa María Sánchez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Las subidas de impuestos impulsadas por el Gobierno de coalición en los últimos años han desplazado a España al puesto número 34 del total de 38 países de la OCDE que analiza el llamado Índice de Competitividad Fiscal (ICF) que desde hace años construye en EEUU la Tax Foundation.

El índice que confecciona esta fundación premia los bajos niveles de fiscalidad y las estructuras de impuestos que, desde su punto de vista, favorecen la actividad económica y penaliza a los países de mayor imposición. El Instituto de Estudios Económicos (IEE) .-organismo vinculado a la patronal CEOE, que colabora con la Tax Foundation-- ha presentado este martes los resultados del Índice de Competitividad Fiscal (ICF) correspondiente a 2022, que desplaza del puesto 23 que ostentaba en 2019 al puesto 34, solo por delante de Irlanda, Portugal, Italia y Francia.

Entre Estonia y Francia

"España ya es uno de los cinco países con peor competitividad fiscal y con un fuerte retroceso en la actual legislatura, con un retroceso de nueve posiciones desde 2019", ha resumido el presidente del IEE, Íñigo Fernández de Mesa. Según este centro de estudios, "ningún país ha experimentado una pérdida de competitividad fiscal tan intensa como España durante el trienio 2020-2022". La razón de ello es que "España ha afrontado la actual situación de crisis de oferta con subidas de impuestos, mientras que los demás países los han reducido, y eso ha empeorado la posición competitiva de España", según ha resumido el director general del IEE, Gregorio Izquierdo. Según el IEE, , "la posición de España seguirá empeorando con las continuadas subidas de impuestos y la creación de nuevas figuras tributarias previstas por el Gobierno actual para 2023".

El ICF sitúa a Estonia tiene el sistema fiscal mejor diseñado de la OCDE en 2022. En el Impuesto sobre Sociedades, por ejemplo, este país báltico solo hace tributar el reparto de dividendos a una tasa del 20%, quedando libre de tributación aquellos beneficios que no se distribuyen y se reinvierten. Por otro lado, su IRPF consiste, simplemente, en una «tarifa plana», igualmente del 20%, y su impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) solo grava el valor del suelo. También se sitúan en la parte alta de la tabla del ICF de la Tax Foundation los sistemas fiscales de Letonia, Nueva Zelanda, Suiza, República Checa, Luxemburgo, Hungría, Lituania, Turquía e Israel. Alemania ocupa el puesto 15º; Estados Unidos, el 22º y Reino Unido, el lugar 26º, sobre el total de los 38 países analizados.

Presión fiscal

Además de presentar el Índice de Competitividad Fiscal que elabora la Tax Foundation, el IEE también ha presentado este martes sus estimaciones sobre presión fiscal en España. Según el centro de estudios vinculado a la CEOE, la presión fiscal ya ha superado el 42% del PIB en 2022 y, por lo tanto, se sitúa por encima del 41,7% de media en la Unión Europea en 2021 (último año para el que se dispone de datos). Los datos oficiales sobre 2022 aún tardarán meses en ser publicados.

El IEE construye su propio "indicador de presión fiscal normativa" que otorga a España 116,4 puntos, un 16,4% más elevada que la media de la UE y muy por encima de los 110 puntos del sistema español en 2019. El IEE señala la imposición empresarial y sobre el patrimonio como las dos figuras tributarias en las que España tiene mayor presión fiscal normativa.

Así, en la tributación sobre el patrimonio la posición de España es un 40,8% peor que la de la UE, y un 38% menos competitiva que el promedio de la OCDE. De hecho, España presenta la imposición patrimonial más gravosa de la OCDE, sólo por detrás de Italia. El estudio aún no toma en cuenta la introducción en 2023 del nuevo impuesto para patrimonios a partir de 3 millones de euros. "Con esta medida seguro que nos situaremos en el último país por la cola", vaticina Fernández de Mesa. Para el IEE, es "urgente" la "reversión de las subidas impositivas aplicadas en plena pandemia y la reforma de todos aquellos aspectos que reducen la eficiencia de nuestro sistema tributario".