Tras la reforma laboral

UGT reclama reforzar la vigilancia del fraude con los fijos discontinuos en las ETT

Ros descarta una ola de eres en las empresas catalanas durante el 2023

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camil-ros / Joan Cortadellas

Gabriel Ubieto

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UGT de Catalunya ha reclamado a la Inspección de Trabajo que refuerce su vigilancia sobre el uso que realicen las empresas de la figura del fijo discontinuo, aupada por la nueva reforma laboral y que se ha disparado en los últimos meses. "Hemos de hacer seguimiento del fijo discontinuo", ha anunciado el secretario general de UGT de Catalunya, Camil Ros, este miércoles en rueda de prensa. También ha pedido prudencia en relación a la polémica surgida sobre esta figura y si maquilla o no las actuales cifras de ocupación y paro y ha afirmado que desde la central no tienen constancia de problemas o irregularidades masivas de momento con este tipo de contrato. Sí ha señalado que desde su organización estarán especialmente atentos en el uso que las empresas de trabajo temporal (ETT) hagan de este contrato. Contrato vetado para estas compañías hasta la recién estrenada normativa laboral.

La figura del fijo discontinuo -un empleado indefinido que trabaja unos meses al año y permanece inactivo el resto- ha proliferado desde la aprobación de la reforma laboral hace un año. En Catalunya, en 2019 se firmaron un total de 41.155 contratos de este tipo en todo el 2019, mientras que en 2022 dicha cifra escaló a los 297.324; se ha multiplicado por siete. Así lo constatan los datos recopilados por la UGT y difundidos este miércoles. Una figura "claramente mejor" que un contrato temporal, según ha destacado Ros, pero que no tiene la misma estabilidad que un contrato indefinido a tiempo completo.

"Tenemos que vigilar que los fijos discontinuos estén más tiempo trabajando que en paro", ha insistido. En su opinión, empresas y sindicatos debieran pactar que los fijos discontinuos tuvieran garantizada una actividad mínima de siete u ocho meses al año, para que así pudieren generar cotizaciones suficientes para estar cubiertos por una prestación mientras no estuvieren trabajando. Y evitar que la proliferación de los fijos discontinuos no sea una mera mutación del flujo de contratación temporal que hasta ahora ha caracterizado a las compañías catalanas y del conjunto de España.

Ros ha cargado también contra el PP por sus críticas al Gobierno en relación a esta figura, en las que lo acusa de maquillar los actuales datos del paro -los más bajos en 15 años-. "Denota su profundo desconocimiento [de la figura] y su hipocresía”, en tanto que el PP no se ha quejado hasta ahora de la incidencia de los fijos discontinuos en las estadísticas y que es el "gran garante de la precarización que supuso la reforma laboral del 2012", según ha criticado el líder de la UGT de Catalunya.

Destierra una ola de eres en 2023

El secretario general de la UGT de Catalunya se ha mostrado prudente de cara a cómo evolucionará el empleo durante el 2023, que ha calificado de un año de "amenaza económica permanente". No obstante, ha insistido en que actualmente "no hay ningún indicador que nos mande a una recesión" y ha reclamado a las administraciones "menos discursos y más políticas de reactivación económica". En este sentido ha afirmado que sus delegados sindicales en las empresas le transmiten que las bolsas de horas para la flexibilidad interna se están utilizando mayoritariamente de manera normal y no tienen señales de parada económica.

Ros también ha invocado el espíritu de consenso que dio origen a la última reforma laboral y ha instado a la patronal a "llegar a un acuerdo salarial para el 2023". Ha insistido en que mayores aumentos salariales -actualmente los salarios por convenio suben al 2,7%, frente a un IPC del 5,8%- revierten en una mejora del consumo doméstico. "Si no hay grandes acuerdos, habrá grandes movilizaciones", ha alertado. "Porque la movilización sirve", ha insistido, en tanto que allí donde los sindicatos han organizado conflictos han logrado mejorar las condiciones salariales ofrecidas por las empresas. "No es que las empresas no pudieran subir salarios, es que no querían", ha afirmado.