Seguimiento del presupuesto
La Generalitat aspira a ejecutar tres de cada cuatro obras proyectadas este 2022
Infraestructures.cat calcula que finalizará el año con el 72,32% de las iniciativas culminadas
Los contratistas temen que no mejore la situación mientras los expertos piden más evaluación y seguimiento
Cristina Buesa
Periodista
Especialista en infraestructuras de movilidad, me ocupo de los temas de economía azul y de la Copa América de vela.
La Generalitat espera acabar el año con casi tres de cada cuatro obras que había proyectado ejecutadas, concretamente con un 72,32% de los proyectos de Infraestructures.cat. Esta es la estimación que consta en el último informe de actividad mensual de la empresa pública que se encarga de la mayoría de las obras del Govern. En los últimos cinco años, desde 2018, siempre se ha superado el 70%.
Hasta septiembre de 2022, según el Departament de Economia i Hisenda, el Ejecutivo ahora en solitario de Pere Aragonès solamente ha ejecutado un 32,1% de lo que había presupuestado. Hay que tener en cuenta que este dato, que aparece en los informes mensuales de ejecución del Departamento, únicamente incorpora la inversión real de las diferentes ‘conselleries’, el Institut Català de la Salut (ICS) y Catsalut, pero no de las 200 empresas públicas que, aunque con presupuestos muchas veces menores, también suman, advierten fuentes de Economia.
Valorar números absolutos
Esta cifra del 32,1% es ligeramente inferior a la que se había dado en 2021, que fue del 35,7%. En 2020 fue del 38,1%; en 2019, del 42,3% y, en 2018, del 48,4%. Sin embargo, hay que valorar los números absolutos porque el porcentaje superior de un año no acarrea que obligatoriamente se destine más dinero. Por ejemplo, la ejecución de este año del 32,1% supone 350,6 millones, mientras que el 35,7 del 2021 a estas alturas representaban 319,4 millones de euros.
Una de las peculiaridades, entre muchas otras, de este 2022 es que este año se han presupuestado de golpe todos los fondos Next Generation asignados a fecha de diciembre de 2021, independientemente del periodo de ejecución (en algunos casos, como los del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia se alargan hasta el 2026).
El “vicio” de presupuestar mucho
Hace dos semanas, la Cambra de Contractistes d’Obres de Catalunya (CCOC), durante la presentación del informe de licitación de obras en Catalunya del tercer trimestre de este año, alertó de que la situación, de nuevo en este ejercicio, era preocupante. Recordó que el Ministerio de Transportes solo ha ejecutado hasta el 30 de junio un 16% de lo presupuestado para el 2022, concretamente un 15,78% (o sea, se han gastado 348,38 millones de euros de los 2.207 previstos).
Aprovechó para lamentar el comportamiento ejecutor del Estado y aseguró que desde el 2015 su media de ejecución en Catalunya había sido del 60%, mientras que la media en el resto comunidades autónomas escalaba hasta el 75%. En una conversación con este diario, su presidente, Lluís Moreno, se ha quejado de que los datos sobre el grado de cumplimiento de las administraciones siempre cuestan de obtener: “Son muy reservados y, cuando salen, se confirma que su vicio es presupuestar mucho y cumplir poco”.
Estimaciones pesimistas
Moreno teme que, en los dos meses que quedan para acabar el año, el panorama no varíe demasiado y que, según sus cálculos, lo ejecutado por parte del Estado alcance como mucho el 40% y, en la Generalitat, el 65%. Lo que más angustia en el sector, que acumula cierres de empresas, es la volatilidad de los precios de las materias primas como consecuencia de la guerra de Ucrania.
El Gobierno central ha actualizado esos importes para adaptarse a la realidad económica de los contratistas y la Generalitat ha hecho lo mismo, aunque la ralentización de los procesos por ese estira y afloja también ha perjudicado probablemente el grado de ejecución de los trabajos.
"Monitorizar" los proyectos
Fuentes del sector explican que, hasta que no se produjo esa revisión de precios, en algunas ocasiones las adjudicatarias mantenían una actividad mínima en las obras, por ejemplo, de una estación, a la espera de que la administración afectada aprobara los nuevos costes y les saliese a cuenta.
Pero, ¿cómo resolver el decalaje entre lo presupuestado y lo ejecutado? El profesor de Economía y director del Observatorio de Análisis y Evaluación de Políticas Públicas de la Universitat de Barcelona (UB), Daniel Albalate, considera que hay que "monitonizar" más los proyectos. "Es importante realizar una evaluación 'ex ante', previa al inicio, para valorar los riesgos posibles y también durante la ejecución", propone. De este modo la distancia entre los anuncios y la realidad se reduciría.
Suscríbete para seguir leyendo
- Una intensa granizada impacta en Barcelona y el litoral catalán
- El SMS que Hacienda está enviando a todos los que han hecho esto en su declaración de la renta
- Sumergir los pies en vinagre, la nueva tendencia que arrasa: estos son sus beneficios
- Catalunya rechaza el reparto de menores no acompañados llegados a Canarias que propone el Gobierno
- Encuesta elecciones Catalunya: El PSC se afianza en cabeza y Junts toma la delantera en su pulso con ERC
- Saltan las alarmas por el estado de salud de uno de los Mozos de Arousa
- Una familia recupera la titularidad de un piso de Girona tras varios intentos de desahucio
- Un luchador iraní es golpeado por el público y suspendido de por vida tras pegar una patada a una chica en el ring