Tecnología publicitaria
Google se enfrenta a una demanda de 25.000 millones por abuso de la publicidad digital
Una serie de denuncias desde la Unión Europea y el Reino Unido acusan al gigante de una conducta anticompetitiva que perjudicaría tanto a medios de comunicación digitales como a pequeñas empresas
Carles Planas Bou
Periodista
Periodista tecnológico. Pasé más de cuatro años como corresponsal en Berlín. También he trabajado en Austria, Hungría, Países Bajos y Canadá. Graduado en Periodismo por la URL y máster en Relaciones Internacionales por la UAB. Entre el mundo digital y la política internacional.
A Google se le acumulan los problemas legales en Europa. La multinacional estadounidense se enfrenta a una serie de demandas que la acusan de abusar de su dominio en el mercado de la publicidad digital para perjudicar a sus competidores y que podría alcanzar los 25.000 millones de euros, según ha adelantado 'The Guardian'.
Las demandas, lanzadas desde los Países Bajos y desde el Reino Unido, señalan que Google habría incurrido en una conducta anticompetitiva que perjudicaría el negocio de medios de comunicación digitales y de pequeñas empresas, entre otros actores. Así, las demandas buscan "obtener una compensación para los editores de la Unión Europea (UE) y del Reino Unido".
"Esta importante demanda representará a un grupo de víctimas de la conducta anticompetitiva de Google en el ámbito de la tecnología publicitaria que han perdido colectivamente unos 7.000 millones de libras (unos 8.045 millones de euros)", ha explicado al 'Guardian' Toby Starr, socio del bufete británico de abogados Humphries Kerstetter.
La presentación de esas demandas no significa que ambas se vayan a resolver de forma favorable. Google ya ha asegurado que "combatirá enérgicamente" unas demandas que ve como "especulativas y oportunistas". El litigio, aún por abrir, podría alargarse en los tribunales durante años.
Gigante de la publicidad
Google es mucho más que el principal buscador del mundo. El gigante es el principal líder del mercado de la publicidad digital, pues usa el poder de su buscador para coordinar la venta de espacios publicitarios. Los anunciantes pagan grandes sumas de dinero para colocar sus anuncios y llegar así a los usuarios de los servicios de Google. El año pasado la compañía ingresó 209.490 millones de dólares solo en publicidad, suponiendo el 81,3% de su negocio. Así, la publicidad es de lejos el principal motor de un negocio que también se apoya en otros servicios como la nube.
Este no es el único problema que enfrenta Google en Europa. Durante los últimos años, Bruselas ha reforzado su vigilancia sobre la actividad de gigantes tecnológicos estadounidenses como Google, pero también sobre Meta (Facebook), Amazon o Apple, entre otras. En julio del 2018 la Comisión Europea multó a la compañía con una sanción récord de 4.340 millones de euros por su dominio abusivo del mercado de la telefonía móvil a través del sistema Android, que también controla. El Tribunal General de la UE se pronunciará mañana sobre este caso. El pasado noviembre, la justicia europea ya avaló otra multa a Google, entonces de 2.424 millones de euros, al favorecer su servicio de comparación de precios (Google shopping) frente al de sus rivales en su buscador.
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