Indicador adelantado

La pérdida de actividad en Alemania y Francia augura una recesión en Europa

Los directores de compra de las empresas confirman la caída de nuevos pedidos y una acumulación récord de productos sin vender en los almacenes

La demanda de los hogares se frena en Europa por la elevada inflación y la incertidumbre económica

Zwickau (Germany), 26/04/2022.- Volkswagen employee works on an electric cars assembly line at the Volkswagen (VW) vehicle factory in Zwickau, Germany 26 April 2022. In 2021 Volkswagen doubled its electric cars sales compared with 2020 as company is continuing to the transition to e-mobility. (Alemania)

Zwickau (Germany), 26/04/2022.- Volkswagen employee works on an electric cars assembly line at the Volkswagen (VW) vehicle factory in Zwickau, Germany 26 April 2022. In 2021 Volkswagen doubled its electric cars sales compared with 2020 as company is continuing to the transition to e-mobility. (Alemania) / EFE / EPA / FILIP SINGER

Rosa María Sánchez

Rosa María Sánchez

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El deterioro de la actividad económica en Francia y Alemania se está acentuando en el mes de agosto y los indicadores ya apuntan un retroceso del sector privado en el conjunto de la zona euro que alimenta el temor a una recesión en Europa.

El llamado Índice de Gerentes de Compras (PMI por su sigla en inglés) que elabora agencia S&P Global -cuya evolución es vigilada por gobiernos, empresas, analistas y bancos centrales- confirmó este martes que las economías de Alemania y Francia, los dos principales motores de la eurozona, registraron una contracción en el mes de agosto que refleja el deterioro de la confianza y la menor propensión de los hogares al consumo en un contexto de elevadas presiones inflacionistas. Arrastrada por Alemania y por Francia, la actividad del sector privado del conjunto de la zona euro volvió a contraerse en agosto, según este mismo indicador: "Los últimos datos del índice PMI para la zona euro sugieren que la economía se está contrayendo en el tercer trimestre del año", concluye Andrew Harker, director económico de S&P Global Market Intelligence, en el informe publicado este martes.

"Las presiones del coste de la vida han hecho desaparecer el repunte económico en el sector servicios observado tras el levantamiento de las restricciones de la pandemia, mientras que el sector manufacturero siguió sumido en una cotracción en agosto, registrando otra acumulación récord de existencias de productos terminados debido a que las firmas no han podido vender los productos en el entorno acutal de caída de la demanda", añade el analista antes de concluir: "Este exceso de existencias sugiere que existen escasas probabilidades de mejoras para la producción manufacturera a corto plazo".

La posibilidad de una recesión en la zona euro (a partir de un mínimo de dos trimestres consecutivos con tasas negativas en la variación de su PIB) no forma parte del escenario central del Banco Central Europeo pero es una hipótesis cada vez más temida por el conjunto de los analistas.

Indicador adelantado

El Índice de Gerentes de Compras ('Purchasing Managers Index') de la zona euro se elabora a partir de encuestas remitidas a un panel representativo de directivos de más de 5.000 empresas pertenecientes a los sectores manufacturero y de servicios de Alemania, Francia, Italia, España, Países Bajos, Austria, Irlanda y Grecia. El índice incorpora variables sobre nuevos pedidos, producción, contratación de trabajadores, plazos de entrega de los proveedores, stocs en almacenes, precios de los insumos y compras. A partir de este cóctel de datos, estos informes mensuales constituyen un indicador adelantado de la actividad económica, pues se publican antes de otros comparables producidos por organismos gubernamentales.

En España, en Europa y en el mundo existe mucha incertidumbre sobre la evolución de la economía y por eso, el PMI, en tanto que indicador adelantado, atrae la atención de los agentes económicos. Cuando el indicador PMI se sitúa por debajo de 50 puntos, indica contracción de actividad.

En agosto, el índice PIM compuesto de Alemania bajó a 47,6 puntos (la peor lectura en 26 meses). En Francia, el mismo índice bajó a 49,8 enteros. Fuera de estos dos países, "la actividad total en el resto de los países de la zona euro siguió aumentando, aunque sólo ligeramente", añade el informe, que no aporta aun datos detallados sobre la economía española y la de otros países de la UEM. Para el caso español, las últimas estimaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) anticipan una contracción de la economía del 0,2% en el actual tercer trimestre del año.

En conjunto, el índice PMI compuesto de actividad total de la zona euro se situó en 49,2 puntos (49,9 en julio), registrando su nivel mínimo en los últimos 18 meses. "En estos momentos se observa un declive de la producción y la actividad en un amplio abanico de sectores, desde las firmas de materiales básicos y del sector automotriz, hasta las firmas del sector del turismo y de actividades inmobiliarias, a medida que la debilidad económica continúa generalizandose cada vez más", afirma el director económico de S&P Global Market Intelligence. Sobre todo, en la zona euro cayó en agosto la actividad de la industria, donde la producción cayó por tercer mes consecutivo y a un ritmo intenso.

Malas y buenas noticias

La actividad económica se está viendo afectada por una demanda decreciente. El volumen de pedidos acumulados por los gestores de compras de las empresas en la zona euro "se redujo sólidamente por segundo mes consecutivo", según el informe. Los nuevos pedidos cayeron tanto en la industrial como en los servicios y la acumulación de productos no vendidos es creciente. "Las existencias de productos terminados aumentaron en agosto al ritmo más intenso en más de veinticinco años de recopilación de datos, y el ritmo de acumulación marcó un nuevo récord por segundo mes consecutivo", se afirma.

Las fuertes presiones inflacionistas fueron el factor clave en la reducción de nuevos pedidos. No obstante, la primera buena noticia es que se detecta un menor encarecimiento de las materias primas, cuyos precios siguen creciendo, pero al menor ritmo en un año. La segunda buena noticia que señala el informe es que los gestores atisban que los problemas en las cadenas de suministro globales siguen atenuándose: "Los plazos de entrega de los proveedores continuaron alargándose intensamente, pero al ritmo menos marcado desde octubre de 2020", se afirma.

La mala noticia, es que la pérdida de confianza (el sentimiento económico fue el segundo más bajo desde la ola inicial de la pandemia), la reducción de nuevos pedidos y el aumento de los estocs está llevando a una menor contratación de trabajadores. El empleo volvió a aumentar entre las empresas encuestadas, pero con un ritmo decreciente por tercer mes consecutivo.