Guerra en Ucrania

Un embargo energético total a Rusia restaría hasta 1,4 puntos al PIB español

El Banco de España estima que el bloqueo podría añadir en torno a 1 punto a la inflación en el primer año

Antorcha de gas junto al cartel de la compañía Lukoil en la plataforma petrolera Filanovskogo en el Mar Caspio, en Rusia.

Antorcha de gas junto al cartel de la compañía Lukoil en la plataforma petrolera Filanovskogo en el Mar Caspio, en Rusia. / Maxim Shemetov

Rosa María Sánchez

Rosa María Sánchez

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La interrupción total de las importaciones de materias primas energéticas procedentes de Rusia tendría "un impacto significativo" sobre la economía española en el primer año, en el que podría restar hasta 1,4 puntos al crecimiento económico y añadir 1,2 puntos a la inflación. Así lo estima el Banco de España en un estudio titulado 'Consecuencias económicas de un hipotético cierre comercial entre Rusia y la Unión Europea', publicado ese martes, unas horas después del acuerdo alcanzado en la UE-27 para un embargo parcial y progresivo del petróleo ruso que pretende llegar al 90% de las compras a finales de 2022.

"Un hipotético corte de suministro supondría una notable reducción de la oferta energética disponible y un significativo aumento de los costes de producción", resume el Banco de España para introducir los efectos sobre el crecimiento y sobre la inflación de un embargo energético a Rusia.

En el escenario central, el Banco de España estima que la suspensión total del suministro energético de Rusia restaría 1,1 puntos al PIB español y añadiría 0,9 puntos a la inflación. Estas estimaciones se sitúan dentro de una horquilla de entre 0,8 y 1,4 puntos de merma del PIB y de entre 0,8 y 1,2 puntos adicionales de inflación en el primer año después de la interrupción de las importaciones.

La mayor o menor gravedad del impacto estaría en función de la capacidad de las economías europeas de sustituir las fuentes energéticas rusas en el menor plazo posible. De hecho, el Banco de España estima que la mitad de la caída del PIB estimada para España se debería al impacto a través de los flujos comerciales con el resto de los países socios de la UE. Para el conjunto de la UE, el Banco de España prevé un retroceso de entre el 2,5% y el 4,2% en el PIB (el triple que en España) y un incremento de entre 1,6 y 2,7 puntos en la tasa de inflación (el doble).

Escenario de ruptura comercial total

En el caso de una ruptura comercial completa con Rusia -más allá de los productos energéticos- el efecto sobre la economía española se podría traducir en una menor crecimiento del PIB de 1,8 puntos (es decir, una caída adicional de 0,7 puntos respecto del escenario central estimado para el supuesto del embargo energético). En cuanto a la inflación, el impacto total sería de 1,4 puntos (un efecto adicional de 0,5 puntos con respecto al escenario inicial, de 0,9 puntos de mayor inflación en el primer año).

El análisis asume que España no sería el país europeo más perjudicado por la interrupción de la relación energética con Rusia, dada su menor dependencia respecto de los productos rusos. En todo caso, se habla de un impacto "significativo" que se filtrará en la economía española, no solo por los efectos directos, sino por canales indirectos derivados de perjuicio mayor que sí sufrirán grandes socios comerciales de España -como Alemania, Francia o Italia, con mayor dependencia energética de Rusia- y que se propagarían en España a través de las cadenas globales de producción, en forma de encarecimiento de las importaciones, de falta de suministros industriales o de mermas en las exportaciones españolas hacia esos países.

En el caso de las economías europeas, solo el impacto del embargo energético se situaría entre 1,9 y 3,4 puntos de menor crecimiento para Alemania; entre 1,2 y 2 puntos, para Francia y entre 2,3 y 3,9 puntos, para Italia.

Sectores

En general, los sectores más afectados serían aquellos más intensivos en uso de energía, como son el transporte, la industria de metales básico o la industria química, mientras que el efecto sería más limitado para los sectores de servicios.

En particular, entre los sectores españoles, el mayor impacto se concentraría en los sectores de transporte marítimo, terrestre y aéreo, así como en los de pesca, metales básico, industria química o equipos electrónicos. En el extremo opuesto, los sectores inmobiliario, de educación o servicios financiero.

Además, se prevé que se puedan propagar en España efectos sectoriales provenientes de otros países. Algunos sectores de la economía española como la fabricación de vehículos o la producción farmacéutica, tienen un alto nivel de dependencia de sus clientes y proveedores situados en otros países de la UE. Así, estos sectores se verían expuestos de manera indirecta a las limitaciones de producción en el resto de los países debidas a las restricciones energéticas.