Previsiones económicas

La Cambra descarta un escenario de estanflación e insta a la moderación salarial

El servicio de estudios de la entidad revisa a la baja 1,5 puntos el crecimiento este año hasta el 4,8%

Mònica Roca.

Mònica Roca.

Eduardo López Alonso

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La Cambra de Comerç de Barcelona descarta un escenario de estanflación e insta a la moderación salarial. El fuerte aumento de los costes y los precios ha supuesto una "intensa" revisión a la baja de las previsiones de crecimiento económico de Catalunya este año por parte del servicio de estudios de esta institución; hasta el 4,8% este año, 1,5 puntos menos de lo previsto. Para el responsable de estudios económicos de la Cambra, Joan Ramon Rovira, "pese a la revisión a la baja del crecimiento los datos no indican un escenario de riesgo de estanflación (estancamiento económico o recesión en un contexto de subida de precios generalizada)". Para la presidenta de la Cambra, Mònica Roca,  en la situación actual el gran motor de la economía catalana es la inversión, y especialmente de los fondos europeos Next Generation: "Si Catalunya representa el 19% del PIB español, el 25% de la industria manufacturera, el 23% de la investigación y el 25% de las exportaciones, debería recibir entre el 20% y el 25% de los fondos europeos, un porcentaje claramente superior a las transferencias realizadas en 2021".

Rovira considera fundamental para la economía que no se produzca una espiral de salarios como consecuencia del alza actual de los precios, ya que de esa manera sería posible en el futuro que los precios bajen si los costes vuelven a reducirse. Como consecuencia de la actual situación, dibujada por 3.000 entrevistas a empresas asociadas a la Cambra, el servicio de estudios descarta que no se vuelva a los niveles del PIB de 2019 hasta el año que viene. El crecimiento económico actual está registrando con asimetrías. En términos laborales, son los autónomos los que están sufriendo más el alza de costes. Agricultores, transportistas, trabajadores del sector restaurador, el turístico o del comercio sufren más el alza persistente de los costes. De esta manera, el crecimiento del empleo no está repercutiendo en crecimientos del PIB equivalentes. Según Rovira se trata de una pérdida de productividad lógica en unos momentos de reactivación, registro de jornadas parciales o incluso periodos de ertes. Los sectores más intensivos en mano de obra son los que registran más contrataciones.

Indexación automática de salarios

En la situación actual, la Cambra considera que no se debería aplicar un sistema de indexación automática de salarios al alza de precios. Pese a que Roca ha recordado que la Cambra no tiene ningún papel en la negociación colectiva (algo que corresponde a las patronales), la institución considera que se deben de buscar fórmulas para lograr el mantenimiento del poder adquisitivo pero sin establecer sistemas que supongan al final la consolidación de la inflación. "Un control de salarios y precios no es posible en una sociedad moderna, pero si los salarios no suben mucho es posible una futura bajada de los precios si los costes se reducen", explicó Rovira.

Curva de tipos

Sobre la curva invertida de los tipos de interés, por la que la deuda a largo plazo ofrece menos rentabilidad que a corto plazo, Rovira ha recordado que no existe consenso sobre si es un indicador fiable de recesión. Aunque en el pasado ha indicado una alta probabilidad de recesión a un par de años vista, en la actualidad la intervención de los bancos centrales en el mercado de deuda ha introducido elementos que pueden invalidar las interpretaciones tradicionales.

El crecimiento económico se está ralentizando como consecuencia del alza de costes y otros factores, pero existen elementos claros para el optimismo, según el análisis de la Cambra. Las expectativas de contratación de las empresas son positivas y aunque la confianza ha bajado con respecto al segundo semestre del año pasado hay sectores como el turístico en pleno crecimiento exponencial (gracias a la recuperación del turismo extranjero).

La industria y la exportación registran síntomas de enfriamiento, ya que Rovira recuerda que "no todas las empresas pueden repercutir alzas de precios". Son ejemplo las firmas exportadoras y las de la construcción. Buscar el equilibrio entre alzas salariales y alzas de precios es clave para evitar una caída drástica del consumo, que sí tendría incidencia directa al suponer el 60% del PIB. Según la encuesta de la Cambra, el 31,6% de las empresas confiesan que subirán sus precios. Los salarios han subido algo por debajo de la inflación prevista. En torno al 5,75% en los convenios firmados entre enero y marzo. Eludir una espiral entre precios y salarios es fundamental para evitar la temida estanflación.