Ribera confirma que el plan para rebajar el precio del gas no se aprobará esta semana

La vicepresidenta achaca el retraso a que todavía están “ultimando los detalles” del plan acordado con Bruselas y confía en su aprobación la próxima semana

Teresa Ribera.

Teresa Ribera. / EFE

Silvia Martinez

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El plan español para fijar un tope al precio del gas y abaratar así la factura de la luz no se aprobará finalmente este martes en el consejo de ministros, tal y como apuntó la semana pasada la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, tras el acuerdo cerrado con la vicepresidenta de la Comisión Europea, Margrethe Vestager. Según ha explicado, todavía siguen ultimando detalles y no será posible concluir el trabajo pendiente para este martes. 

“Estamos ultimando detalles. No es fácil que nos dé tiempo a hacerlo mañana, porque además hoy es festivo en Madrid. Pero estamos acabando de pulir los detalles en esta propuesta definitiva. Así que esperamos que sea cuanto antes”, ha explicado a su llegada a la reunión de emergencia de ministros de energía convocada para este lunes por la presidencia francesa de la UE.  Pese a este retraso, Ribera espera que puedan concluir los trabajos “cuanto antes” y presentar la medida al consejo de ministros la próxima semana. “Mañana probablemente no nos de tiempo pero sin duda la semana que viene”, ha añadido sobre un elemento que ha dicho es “importante” para los consumidores ibéricos.

La vicepresidenta y su homólogo portugués, José Duarte Cordeiro, cerraron la semana pasada con Vestager un acuerdo político para hacer realidad la llamada “excepción ibérica”, aceptada por los Veintisiete en el Consejo Europeo de finales de marzo con el objetivo de permitir a España y Portugal actuar por su cuenta debido al elevado nivel de renovables y las limitadas interconexiones eléctricas con el resto del continente europeo que no llegan al 3%, lo que convierte a la Península en una "isla energética".

La propuesta, según explicaron ambos ministros, consiste en poner un tope al precio del gas de 50 euros por megavatio hora de media durante los próximos doce meses, por encima de los 30 euros de referencia que pidieron inicialmente Madrid y Lisboa pero por debajo de los 90 euros actuales. El objetivo de la medida, que España y Portugal piden desde hace meses para hacer frente a los elevados costes de la luz, tiene como principal objetivo rebajar la factura de la luz de los consumidores ante una situación energética que se ha visto agravada por la guerra de Rusia en Ucrania.

Suministro de gas

Precisamente, sobre el corte del suministro de gas a Polonia y Bulgaria, anunciado la semana pasada por Gazprom tras la negativa de ambos países de aplicar el sistema de pagos exigido por el Kremlin y que obliga a las empresas que quieran seguir comprando gas a pagar en rublos, hablan este lunes los Veintisiete en Bruselas. Una decisión que supone, a juicio de la ministra francesa de energía, Barbara Pompili, una ruptura de los contratos negociados en el pasado y algo inaceptable. "Seguiremos pagando en euros los contratos que se han estipulado en euros o en dólares los que se han estipulado en dólares. No podemos aceptar este tipo de maniobras, que son maniobras que rompen contratos ya establecidos", ha avisado.