Rosa Cañadas aspira a "renovar sin romper" el Cercle

Aún no se han convocado formalmente las elecciones --eso sucederá a mediados de mayo--, pero en el Cercle d'Economia se vive clima preelectoral. Por primera vez en sus más de 60 años de historia se enfrentarán en las urnas dos candidaturas, en vez de una sola de consenso, como era tradicional. La empresaria Rosa Cañadas, presidenta de la fundación Tanja y de Trea Capital Partners y que formó parte de las juntas del Cercle con Antón Costas, Josep Piqué y Salvador Alemany como presidentes, se medirá con Jaume Guardiola, exconsejero delegado del Banc Sabadell y presidente del patronato de Esade miembro de la junta directiva actual actual.

Cañadas se ha presentado este lunes como candidata durante un almuerzo organizado por la Acadèmia Catalana de Gastronomia i Nutrició, presidida por Carles Vilarrubí. Durante un coloquio con los asistentes, entre los que estaban el expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, que trabaja en su candidatura a la alcaldía de Barcelona o la candidata al mismo puesto por Junts, Elsa Artadi, Cañadas apostó por "renovar sin romper" el legado del Cercle. Y defendió incorporar a jóvenes, incluso por debajo de los 30 años.

A juicio de esta directiva, la entidad "tiene que tener voz en Europa" y ser "la voz del Mediterráneo". A través de su fundación, esta doctora en técnicas y mercados financieros y licenciada en Económicas por la Escuela Superior de Comercio de París, trabaja para dar a conocer las oportunidades en el continente africano, y especialmente en norte de África. Cañadas considera que el Cercle ha perdido "un poco de su brillo y esencia" y que requiere "renovarlo para preservarlo".

A su vez piensa que la entidad requiere recuperar espacios para la "reflexión y pensamiento". Ante el otro candidato al que tacha de "continuista", ofrece reforzar esos aspectos que considera un poco perdidos y ofrece "transversalidad" en la junta directiva que aún no ha dado a conocer. En su opinión, el Cercle requiere incorporar voces jóvenes sin abandonar el talento sénior y ser "más valiente para pronunciarse sobre los temas y a tiempo".

Cañadas opina que en los últimos tiempos, el Cercle ha cedido terreno como voz de la sociedad civil ante entidades como Foment del Treball, que ha jugado una buena parte de ese papel desde que la preside Josep Sánchez Llibre.