Crisis energética

Gran apagón: ¿Existe riesgo?

Un llamamiento del Gobierno de Austria a su población ante un potencial fallo en el suministro energético propagó la posibilidad de un apagón en España hace unas semanas. "La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo", llegó a decir la ministra de Defensa, la conservadora austriaca Klaudia Tanner, sobre lo que calificó de "un peligro real, pero subestimado". Estas palabras coincidieron en el tiempo con el cierre del gasoducto del Medgaz, que une Argelia y España, y en medio de unos precios de la energía disparatados en toda Europa que terminaron por condimentar el anuncio austriaco en España. En la "isla energética" que es España el riesgo de apagón se percibe como remoto y en el peor de los escenarios se trataría posibles corte selectivos a determinadores consumidores industriales si el suministro de gas flaquea.

Recortes, alza de precios y hasta velas, respuesta de los pequeños empresarios asturianos al "tarifazo" de la luz

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Sara Ledo

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1 ¿Qué dice el Gobierno?

Hubo quien se lanzó a comprar velas y otros productos ante la posibilidad de apagón, a pesar de que desde el Gobierno español desmintió la mayor: “No estamos ante ningún escenario que nos permita pensar que esto puede ocurrir”, insistió la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. “Es muy difícil que un gran problema, en una gran línea de alta tensión en Europa, nos llegue a producir aquí un efecto generalizado complicado”, explicó la ministra en una entrevista en TVE amparándose en que España “es casi una isla energética, con una interconexión muy inferior a aquello que nos gustaría y que debemos conseguir con Francia”, lo cual “representa también un cordón sanitario, una barrera importante”.

2 ¿Qué opina Red Eléctrica?

El operador del sistema eléctrico, Red Eléctrica, lanzó incluso un comunicado en el que afirmaba que “no existe ningún indicio objetivo que haga pensar que pueda producirse un evento de tales características en nuestro país”. Para hacerse una idea, el sistema eléctrico peninsular cuenta con un elevado nivel de cobertura y su capacidad de generación (107.088 megavatios instalado) más que duplica cualquier pico de demanda que se haya producido hasta el momento (el 17 de diciembre de 2007 se produjo el máximo histórico de potencia instantánea).

3 ¿Cómo afecta la escasez de gas?

El consultor senior de AFRY, Javier Revuelta, explica que "no ha cambiado nada" respecto a otros años que pueda hacer predecir nada parecido a fallo energético grande. Salvo una cosa: la posibilidad de que haya falta gas en Europa por el alza de la demanda, impulsada por China, y la oferta justa. "Pero en España no creo que haga falta por las reservas que tenemos y porque seguirá llegando gas por los gasoductos que tenemos", explica.

Según Enagás, España cuenta con un nivel de reservas de gas para 40 días. "Si faltase gas y existiese un pequeño riesgo para el consumo industrial, para el consumo doméstico y para la generación eléctrica (el gas es el combustible que utilizan los ciclos combinados para producir electricidad) no habría un apagón, sino que entonces el Ministerio para la Transición Ecológica, Red Eléctrica y Enagás tendría que decidir a quién se le corta", explica. En cuyo caso considera que los que más papeletas tendrían sería la gran industria.

4 ¿Puede haber cortes selectivos?

Hasta hace unos meses existía lo que se denominaba como servicio de interrumpibilidad (una herramienta de gestión de la demanda según la cual la gran industria estaba disponible cuando el sistema eléctrico lo requiriese de acuerdo a criterios de seguridad del sistema, pero también económicos a cambio de una retribución). Y aunque ya no existe se pueden hacer cortes selectivos. "El suministro eléctrico lo veo casi al cien por cien y si no sería un corte muy pequeño que primero afectaría a la industria, pero sería muy improbable que afectase a algún tipo de ciclo combinado", añade Revuelta. "La probabilidad de apagón es nula e igual que la de hace un año", concluye.

5.- ¿Habrá parones en la actividad?

Hasta ahora se han producido algunos parones de actividad industrial vinculada al elevado precio de la electricidad; no, a su desabastecimiento. A mediados de octubre, la empresa siderúrgica Sidenor anunció un paro de su actividad durante 20 días por el “desorbitado” precio de la electricidad que provocó un alza de los costes de la empresa del 25%. Fertiberia decidió adelantar una parada técnica prevista para 2022. Asturiana de Zinc (Azsa) rebajó la producción de sus plantas en las horas más caras del día. Incluso algunas industrias advierten de posibles cierres patronales puntuales para ahorrar en costes energéticos en la recta final del año.  

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