Prueba piloto en Holanda
Tesla se plantea permitir que coches de otras marcas usen sus cargadores en Europa
La compañía de Elon Musk realizará una prueba en diez ciudades holandesas antes de implementar la medida en el resto de países europeos.
La medida, de implantarse, beneficiará a los usuarios de los vehículos que emplean el dispositivo europeo estandard de carga CCS, que son la mayoría.
Xavier Pérez
Director de Motor de Prensa Ibérica
Director de Motor de PRENSA IBÉRICA. Redactor jefe de sección de motor de EL PERIÓDICO desde el año 2000. Miembro del Jurado del Coche del Año en Europa (COTY). Dirijo el portal de motor del grupo Neomotor.com y los suplementos de motor Airbag y Etric by Neomotor.
Tesla ha comunicado que pondrá en marcha un programa de puebas en Holanda para abrir el uso de sus supercargadores al resto de usuarios de vehículos eléctricos de otros fabricantes. El programa piloto se ejecutará en diez ciudades holandesas y todo aquel que no tenga un Tesla podrá recargar usando la aplicación de la compañía. La marca monitorizará los cargadores para que no se produzcan colapsos, priorizando la recarga de sus clientes.
La marca de coches eléctricos disponde de una red mundial de 25.000 supercargadores, mientras que las otras marcas competidoras están empezando a desplegar redes colaborativas compartidas como Ionity. Todos los que quieran cargar en un poste de Tesla deben disponer de la aplicación y del sistema CCS (Combined Chargin System) que se encuentra estandarizado en la gran mayoría de los vehículos eléctricos modernos. BMW, Mercedes-Benz, Ford, Volkswagen, Audi, Porsche, Skoda y Seat equipan sus coches con este sistema de recarga si necesidad de usar un adaptador.
Lo que no será igual para todos será el precio de la recarga. Tesla repercutirá a los que quieran usar sus cargadores en Holanda un importe extra, una cifra que se podría reducir si se apuntan a un modo de suscripción de recarga. "Con esta acción queremos contribuir a acelerar la electrificación a nivel mundial", señala la marca en un comunicado.
Una de cal y otra de arena
Y si la noticia de apertura de cargadores a todo el mundo sonó en plano positivo, el pasado martes Tesla se despertó con una caída del precio de sus acciones en Walll Street tras un tuit de su fundador, Elon Musk, en el que recordaba que aún no había firmado un contrato con la empresa de alquiler Hertz, quien había comunicado que iba a comprar 100.000 coches eléctricos a Tesla. Tras ese anuncio las acciones de Tesla habían crecido hasta una capitalizacion bursátil de 1.000 millones de dólares.
"Tesla tiene mucho más demanda que producción. Es por eso que venderemos a Hertz vehículos por igual margen que el que aplicamos a nuestros clientes. El acuerdo con Hertz no tiene ningún efecto sobre nuestra situación económica", afirmó Elon Musk. Tras estas afirmaciones, las acciones de Tesla llegaron a caer un 0,9%. Por si fuera poco, esta misma semana la agencia estadounidense de seguridad vial (NHTSA) comunicó que la compañía ha tenido que llamar a revisión a unos 12.000 vehículos en Estados Unidos por un problema en un programa de comunicación.
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