Fin del teletrabajo
La Generalitat y las empresas mantienen la vuelta a la oficina pese a la quinta ola
El Govern no estudia con patronal y sindicatos nuevas recomendaciones en relación al teletrabajo
Los funcionarios siguen con su hoja de ruta para reincorporarse progresivamente durante el verano
Gabriel Ubieto
Redactor
Periodista de economía, centrado en el mercado laboral. He crecido como redactor en El Periódico, pero antes hice prácticas en La Vanguardia y escribí durante seis meses desde Chile para Hemisfèria.cat. Ganador del premio Ramon Barnils (2015) por el reportaje "Els ultres prenen partit".
El retorno a la oficina tanto de los trabajadores del sector privado como del público sigue su curso, pese al avance de la quinta ola. El repunte de los contagios, especialmente entre la población más joven, y las nuevas restricciones anunciadas para la noche catalana no se extenderán a la vida laboral de la mayoría. El Govern no estudia con patronal y sindicatos nuevas recomendaciones en relación al teletrabajo, después de la rebaja sobre las mismas el lunes de la semana pasada. Y tampoco prevé interrumpir el plan de regreso a la presencialidad de los funcionarios, que empieza este jueves y que se alargará progresivamente hasta el 1 de septiembre.
El teletrabajo de emergencia sigue su proceso menguante y los trabajadores catalanes continúan su reincorporación a la oficina, la fábrica o cual fuere el centro de trabajo. El retorno es mayoritario y, si bien el trabajar a distancia ha venido a quedarse en muchas empresas, dicha modalidad tiene pocos números de volver en el corto plazo a los niveles alcanzados durante el primer confinamiento. Según un informe publicado este miércoles por la consultora de recursos humanos Manpower, siete de cada 10 directivos afirman que sus plantillas volverán íntegramente a la oficina a lo largo del próximo año. El resto mantendrá un teletrabajo parcial y/o promoverá una mayor flexibilidad horaria, tanto para mejorar la conciliación como para escalonar las entradas y salidas.
Fuentes sindicales consultadas coinciden en señalar que el teletrabajo en el sector privado tuvo dos puntos de inflexión. Por un lado, el final del primer estado de alarma, cuando coincidiendo con el verano y la desescalada muchas compañías activaron la operación retorno, aunque mantuvieron dinámicas híbridas de trabajo. Con grupos burbuja separados para evitar contagios y turnos alternos.
Y el otro momento es el final del segundo del estado de alarma y el presente verano, con la proyección de culminar progresivamente el retorno de todos aquellos empleados en teletrabajo de emergencia para el inicio del próximo curso y que solo queden ejerciendo a distancia aquellos que hayan pactado sus condiciones con la empresa, pero ya de manera permanente y más allá de la pandemia. Durante los últimos meses ha habido un goteo, paupérrimo pero constante, de convenios colectivos de sectores -banca, grandes superficies, química, etc- o empresas -El Corte Inglés, Iberdrola, Allianz y AXA- que han asentado las bases para consolidar esta modalidad entre sus plantillas.
Sin nuevos protocolos
Patronal y sindicatos están revisando las recomendaciones específicas sobre teletrabajo, pero no habrá grandes cambios y la voluntad es más actualizar los protocolos que no incidir en cuestiones como la obligatoriedad o no del teletrabajo, según explican fuentes conocedoras.
Esas mismas fuentes también echan en falta una mayor interlocución con la ‘conselleria’ de Salut, tras asumirla esta Junts. Y explican que con el anterior Govern, cuando tanto Treball como Salut dependían de ERC, había una mejor coordinación entre ambos departamentos. Ahí destacan, pese a las diferencias puntuales, el papel del anterior secretario general de Salut, Marc Ramentol, por su voluntad de escuchar las opiniones de los agentes sociales.
Operación retorno en el sector público
A esta segunda ventana se ha apuntado la Generalitat para con los empleados públicos. Y su plan se mantiene pese a la nueva batería de restricciones y toque de queda nocturno que ha anunciado recientemente. Este plan no fue consensuado con los sindicatos, aunque sí con consulta previa, y tiene su fecha de inicio este jueves 15 de julio. La misma afecta a unos 40.000 empleados públicos, vinculados a los departamentos administrativos; si bien podrán seguir teletrabajando hasta dos días a la semana tal como ya tenían acordado antes de la pandemia.
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