Sánchez saluda la rectificación de Escrivá sobre el recorte de las pensiones del 'baby boom'

El ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luís Escrivá, ha rectificado sus palabras del pasado jueves en las que alertaban a la generación del 'baby boom' que o bien trabajaban más años o bien cobrarían menos pensión. El ministro ha alegado que "no tuve mi mejor día" y que dichas modificaciones en el sistema público de pensiones están por negociar y delimitar con la patronal y los sindicatos. Unos agentes sociales que salieron en tromba a criticar dichas declaraciones del ministro, que calificaron, entre otros, de "desafortunadas".

La rectificación de Escrivá sobre las futuras pensiones de los trabajadores nacidos entre los años 50 y mediados de los 70 fue saludada poco después por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: "Me remito a las palabras del ministro" (de rectificación), dijo, antes de añadir que para cualquier reforma en este ámbito "el método es el diálogo social".

Sánchez aprovechó su comparecencia en La Moncloa junto al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para "reivindicar el trabajo del ministro" Escrivá en el logro del "primer acuerdo social para la reforma de las pensiones en diez años", firmado este mismo jueves. Respecto a las próximas negociaciones para un nuevo factor de sostenibilidad -o "mecanismo de equidad intergeneracional", según lo denomina el Gobierno- y otros elementos pendientes Sánchez dijo: "Dejemos al dialogo social y a los ministros trabajar en los próximos meses".

La rectificación

"Siendo una persona que tiendo a decir que hay que dar certidumbre a los pensionistas y que eso es fundamental y que esta reforma [la firmada esta semana] realmente es eso, tengo que reconocer que ayer no tuve mi mejor día", ha declarado Escrivá este viernes en la rueda de prensa de presentación de los datos del paro de junio.

Escrivá concedió una entrevista a TVE pocas horas antes del primer pacto para reformar las pensiones de la legislatura. Y el primero con acuerdo social en la última década. Esta primera pata de la nueva arquitectura que pretende erigir Escrivá durante los próximos años contempla la revalorización automática de las pensiones en función del IPC del año anterior. Lo que asegura el mantenimiento del poder adquisitivo. Y el otro gran elemento es un sistema de incentivos y desincentivos para que los españoles alarguen su vida laboral y tiendan a jubilarse más cerca de la edad legal de jubilación (66 años).

Pocas horas antes de firmar este pacto, Escrivá se pronunció sobre el segundo bloque de reformas, que todavía está por venir y concretar con los agentes sociales. "Probablemente no transmití adecuadamente esa certidumbre al hablar de algo que todavía está por definir y que probablemente se me entendió mal. Eran unas reflexiones en voz alta del mecanismo de equidad intergeneracional que tenemos que diseñar y discutir en los próximos meses", ha declarado Escrivá este viernes.

Las negociaciones entre el equipo de Escrivá y los agentes sociales durante los últimos meses han transitado por picos de alta tensión entre las partes. Patronal y sindicatos han acusado en más de una ocasión al ministro de "lanzar globos sonda" sobre propuestas concretas para condicionar las negociaciones y sus palabras de esta semana no contribuyen al buen entendimiento entre las partes. "A veces uno duda si es torpeza comunicativa o si hay alguna otra intención detrás. [...] Dar este tipo de mensajes, yendo por libre por parte del ministro, insisto, es cuando menos una torpeza que es bueno que se rectifique cuanto antes", ha opinado el secretario general de CCOO, Unai Sordo; en la mañana de este jueves. "Hay que ser más prudente", ha añadido.