Indra cesa a Abril-Martorell porque no cuenta con la "plena confianza" del Gobierno

Casi una semana después de que trascendiera la intención del Gobierno de cambiar al máximo responsable de la compañía, el consejo de administración de Indra ha aprobado este jueves por fin "por unanimidad" y en el "mejor interés" de la empresa el cese de su presidente, Fernando Abril-Martorell, y su sustitución por el elegido por el Ejecutivo: Marc Murtra, exdirector de gabinete del socialista Joan Clos en su etapa de ministro de Industria y exalto cargo del Ayuntamiento de Barcelona también cuando lo lideraba el PSC.

En un comunicado muy poco habitual, la empresa ha dejado claro que el relevo en la presidencia responde únicamente a la voluntad del Gobierno: "El consejo de administración ha considerado que el adecuado desempeño de sus cometidos por el primer ejecutivo requiere que en todo momento cuente con la plena confianza de su principal accionista (el Estado posee el 18,75% de las acciones) dada su condición, además, de representante del sector público estatal, principal cliente de la sociedad y cuyas decisiones tienen un impacto relevante en su negocio".

Además, el órgano de administración ha querido dejar constancia "por unanimidad (incluyendo al Estado, por tanto) de la valiosa contribución y liderazgo del Sr. Abril-Martorell durante su etapa como presidente, valorando muy positivamente su gestión y la sustancial  transformación operada en la Sociedad desde que asumió sus funciones en 2015". El directivo ha sido cesado como presidente y ha dimitido como consejero, y en su lugar ha sido nombrado Murtra, que al contrario que su antecesor no tendrá poderes ejecutivos.

En un correo a los empleados, Abril-Martorell ha reconocido que "hubiera deseado completar" su etapa como presidente y consolidar el liderazgo de Indra y su papel como uno de los grandes grupos europeos de tecnología, consultoría y defensa. "Queda tarea por delante y estamos en un entorno muy competitivo, pero estoy seguro de que, con el gran grupo profesional que habéis demostrado ser, y liderado por un equipo de gestión extraordinario, los desafíos que os aguardan serán superados con éxito", ha señalado.

Nuevos ejecutivos

Los nuevos responsables del día a día de la empresa serán ahora los consejeros ejecutivos Ignacio Mataix Entero y Cristina Ruiz Ortega, responsables respectivamente de las divisiones de transporte y defensa y de Minsait (la unidad de consultoría de transformación digital y tecnologías de la Información). Ambos directivos han sido nombrados consejeros delegados con carácter solidario.

"El consejo ha constatado que la permanencia de los otros dos consejeros ejecutivos, quienes ya están a cargo, en sus respectivas responsabilidades, de las operaciones de la Compañía, así como del director general corporativo (Javier Lázaro), permite garantizar la continuidad de la gestión al máximo nivel, ejecutando el Plan Estratégico 2021-2023 aprobado por unanimidad por el Consejo de Administración el pasado mes de febrero", ha sostenido en la nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). 

El Estado privatizó Indra en 1999, pero para evitar opas hostiles y mantener su españolidad por considerarla una "empresa estratégica", en 2013 compró el 20,1% de su capital por 337 millones a Bankia, que estaba obligada a vender sus participaciones industriales por su rescate. Actualmente posee el 18,75% de las acciones y ocupa dos de los 13 puestos de su consejo de administración a través del exministro Miguel Sebastián y el exdiputado socialista Antonio Cuevas.

Los otros propietarios relevantes son la Corporación Financiera Alba, 'holding' de participaciones industriales del Grupo March (9,99%) y el fondo estadounidense Fidelity (9,809%), por delante de Norges Bank, la gestora de activos del Santander o T. Rowe Price Associates (los tres con porcentajes del capital de en torno al 3%).