tributación empresas

Bruselas reactiva sus planes para que las multinacionales paguen más impuestos

La Comisión Europea presenta su hoja de ruta para reformar la tributación de las empresas

Paolo Gentiloni, ayer, durante el anuncio de la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones.

Paolo Gentiloni, ayer, durante el anuncio de la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones.

Silvia Martinez

Silvia Martinez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Comisión Europea quiere aprovechar el cambio de tono en Washington, con la llegada de Joe Biden, para relanzar la reforma sobre la tributación de las grandes empresas. Aunque buena parte de la misma dependerá de las negociaciones en la OCDE y el G20, Bruselas ha presentado ya la hoja de ruta con la que aspira a actualizar el sistema impositivo que culminará en 2023 con una propuesta para establecer una base común del impuesto de sociedades para luchar contra la elusión fiscal y lograr que las grandes empresas paguen más impuestos

“Ha llegado la hora de replantearse la tributación en Europa. La renovación de la relación trasatlántica brinda la oportunidad de avanzar de forma decisiva hacia una reforma tributaria mundial” y “debemos hacer lo posible para aprovechar esta oportunidad”, sostiene el comisario de asuntos económicos, Paolo Gentiloni, Cada año, según sus estimaciones, los Estados miembros pierden 50.000 millones por fraude en el IVA, otros 46.000 millones debido a la elusión fiscal internacional de particulares y entre 35.000 y 70.000 millones por la evasión fiscal a cuenta del impuesto de sociedades.

Esta realidad requiere, según el italiano, una agenda con medidas decisivas que adoptarán en los próximos tres años para aumentar la transparencia fiscal y que concluirá con un nuevo marco de tributación para las empresas denominado BEFIT que, según Bruselas, fijará un código normativo único , reducirá los trámites administrativos y costes de conformidad y minimizará las oportunidades de elusión.

No se trata de crear un tipo impositivo único en materia de sociedades sino de fijar una base común para calcular los impuestos que las grandes multinacionales de deben pagar y el reparto de los beneficios. Esta propuesta sustituirá a la CCCTB, el fallido intento de propuesta de base imponible consolidada común del impuesto de sociedades que, diez años después de ser propuesta, se retirará de la mesa sin haber convencido a países como Irlanda o Finlandia.

Medidas a corto plazo

Mientras se logra avanzar a nivel internacional para crear el terreno propicio que permita avanzar en esa dirección, Bruselas plantea una serie de iniciativas para los próximos dos años. Este martes, por ejemplo, ha aprobado una recomendación sobre el tratamiento fiscal de las pérdidas en la que insta a los Estados miembros a permitir que las empresas puedan compensar retroactivamente bases imponibles negativas como mínimo en el ejercicio fiscal anterior.

Esta medida, según Bruselas, será beneficiosa para las empresas que eran rentables antes de la pandemia y beneficiará particularmente a las pymes. El plan también incluirá medidas para que determinadas grandes empresas que operen en la UE publiquen sus tipos impositivos reales, con el objetivo de atajar el uso abusivo de sociedades fantasmas, y otras para hacer frente al sesgo deudista en el impuesto sobre sociedades actual, que trata la financiación de las empresas con deuda de forma más favorable que la financiación con fondos propios.