1.700 millones de inversión

Foment insta a un "gran pacto institucional" para ampliar el Aeropuerto de Barcelona

La patronal reclama un acuerdo rápido entre Port de Barcelona y AENA, y el apoyo claro del Govern y los ayuntamientos

Jose Sánchez Llibre, presidente de Foment del Treball.

Jose Sánchez Llibre, presidente de Foment del Treball.

Eduardo López Alonso

Eduardo López Alonso

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La patronal catalana Foment del Treball instó este jueves a un "gran pacto institucional" y la "máxima complicidad" de las organizaciones para facilitar la ampliación del Aeropuerto de Barcelona y permitir que se convierta en un 'hub' internacional que impulse la reactivación de la economía catalana. El acuerdo, que debería alcanzarse antes de finales de julio, pasa por un acuerdo entre Port de Barcelona y el Aeropuerto de El Prat, ya que la ampliación afectaría a la terminal de contenedores de Hutchison. Fuentes de Port de Barcelona han reconocido que existen ya contactos con AENA y que la única condición es que la actividad del puerto no se vea afectada durante las obras. También debe pasar por un acuerdo con la UE, ya que la ampliación afectará al espacio protegido de La Ricarda, y deberían fijarse compensaciones medioambientales.

En opinión del presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, si no se alcanza un acuerdo "el colapso se producirá". Para Foment, están en juego unas inversiones de unos 1.700 millones de euros entre el 2022 y el 2026. Esa inversión crearía 83.000 empleos directos y 356.000 indirectos en ese periodo. La ampliación permitiría pasar de una capacidad de gestión de 55 millones de pasajeros a unos 70 millones. El Aeropuerto de Barcelona ampliado permitiría incrementar el PIB catalán en dos puntos, hasta suponer el 8,9% del PIB.

Para Sánchez Llibre "es imprescindible" la complicidad entre el Govern, los ayuntamientos del Barcelonés y el Baix Llobregat, en forma de un "gran pacto institucional" que permita también preservar la actividad del sector agroalimentario en la zona. Sánchez Llibre ha reconocido que la situación política actual puede ser un problema para tomar una decisión rápida, pero que sería una "irresponsabilidad" no permitir la creación de un gobierno autonómico y dar vía libre a la ampliación. El Govern todavía no ha dibujado esa ampliación como una prioridad como consecuencia del desplome del uso de la infraestructura por la pandemia.

Foment ha instado también a que AENA empiece a pensar en el desarrollo de un nuevo aeropuerto fuera de la zona de Barcelona, además del de Girona o Reus, todos ellos interconectados mediante una eficiente red ferroviaria. Ese plan sería complementario al desarrollo del Aeropuerto de Barcelona como punto de conexión de vuelos internacionales. 

El Govern ha visto hasta ahora con desconfianza que AENA supedite el desarrollo de la conectividad aérea catalana a ampliar el Aeropuerto de Barcelona. El 'conseller' de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat, Damià Calvet, acusó recientemente al presidente de AENA, Maurici Lucena, de "reducir el futuro", en definitiva de aguar las expectativas para un periodo de recuperación. Lucena ya ha admitido públicamente que si no hay ampliación, el futuro económico de Catalunya se verá seriamente afectado, al recortar las posibilidades de atraer talento internacional. El mismo 'conseller' de Empresa, Ramon Tremosa, reconoció también esta semana que el aeropuerto de Barcelona tiene una importancia crucial no solo desde un punto turístico, también para atraer estudiantes, teletrabajadores, empresas emergentes, comercio internacional e inversiones directas de empresas extranjeras. Sobre si el Aeropuerto de Barcelona perdería competitividad frente al de Madrid sin la ampliación, Lucena advierte de que sí, que efectivamente será un elemento crucial. Para Calvet, hay inversiones pendientes "que son determinantes y que no se quieren abordar desde hace años". Pero AENA ha invertido del orden de 48 millones de euros en readaptar un dique de la terminal T1 y habilitarlo para tener más filtros de control de pasajeros e instalaciones que puedan dar servicio a aviones que operan rutas de largo alcance y de mayor capacidad. Pero hasta la máxima responsable del Aeropuerto de Barcelona, Sonia Corrochano, ha reconocido que los niveles de tráfico aéreo "no se van a recuperar antes de 2022 o 2023". Actualmente apenas están operativas media docena de rutas intercontinentales, Singapur, Miami, Doha, Abu Dhabi, Buenos Aires, Gambia y Senegal... pocos vuelos y menos opciones.  

Los vuelos internacionales ganaron terreno en el 2019 hasta aportar el 70% de los 52 millones de pasajeros que usaron las terminales del Prat. De aquello, actualmente queda poco. Vueling, Ryanair y Easyjet centran la actividad con conexiones cortas. Antes de la pandemia había casi una cincuentena de vuelos intercontinentales y la remodelación iniciada y la tercera pista deberían adaptarse a las necesides de aviones más grandes. En tiempos de peticiones de sostenibilidad ambiental, la actividad aeroportuaria mira hacia otro lado a cambio de reactivación económica y conexión intercontinental. 

Actualmente la T1 ya se ha adaptado a grandes aviones como el A380 con nuevas puertas de embarque y de la habilitación de pasillos anchos y de fingers que facilitan el embarque y desembarque de pasajeros. flujo de pasajeros para poder dar servicio a los mega aparatos como el A380 que usa Emirates, la obra ha supuesto la construcción de dos plantas nuevas en la terminal, para dividir los vuelos que se desplazan dentro del espacio Schengen de aquellos que viajan fuera de los límites de la Unión Europea.Pese a las fuertes reticencias con que topa un plan de ampliación de las pistas del aeropuerto para poder ganar tráfico, AENA no renuncia a hallar una solución que permita seguir creciendo. El operador aeroportuario calcula que los niveles de tráfico de la época prepandemia se recuperarán el año 2026. Entre tanto, la T1 concentra las inversiones de mejora para optimizar el servicio mientras la T2 permanece completamente cerrada y no hay fecha prevista para su apertura.