'caso Tándem'

El juez debe decidir si investiga a Repsol por contratar a Villarejo

Anticorrupción remite un escrito a García-Castellón en el que aprecia posibles indicios de un delito de cohecho activo

Ex comisario Villarejo    David Castro

Ex comisario Villarejo David Castro / David Castro

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El magistrado de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, debe decidir si investiga a Repsol por contratar en su día al excomisario José Manuel Villarejo para espiar a quien fuera presidente de la constructora Sacyr Vallehermoso, Luis del Rivero.

Este paso es consecuencia de la solicitud de la Fiscalía Anticorrupción de la causa 'Tándem', que ha enviado un informe a García-Castellón. En el mismo, el ministerio público pide que se impute al presidente de Repsol, Antoni Brufau, así como al de la Fundación Bancaria La Caixa y Criteria -principal accionista de CaixaBank- Isidro Fainé, en el marco de la pieza separada número 21. En esta se investiga el encargo por parte de ambas empresas del Ibex 35 al comisario jubilado para que espiara al entonces presidente de Sacyr Vallehermoso Luis del Rivero.

Según adelanta el diario 'El Mundo', en su escrito los fiscales aprecian indicios de que pudieron cometer un delito de cohecho activo, y ahora el magistrado debe decidir si les cita a declarar en calidad de imputados, algo que se conocerá, según fuentes jurídicas, la próxima semana, informa Europa Press.

Según explica el Ministerio Público, el encargo al excomisario ascendió a 389.400 euros, haciendo frente cada empresa a la mitad de dicho importe y ocultándolo, "cuando menos parcialmente, al manipularse los conceptos de las facturas". El escrito de Anticorrupción, que reproduce en parte 'El Confidencial', explica que el espionaje fue bautizado como proyecto 'Wine' y se llevó a cabo entre 2011 y 2012, todo ello para indagar en las maniobras del expresidente de Sacyr para hacerse con el control de Repsol con la ayuda de la petrolera mexicana Pemex.

Este escenario implicaba, 'de facto', la toma del control de Repsol por parte Del Rivero y de Pemex, que tenía a CaixaBank como accionista de referencia, con las consecuencias que ello suponía para las el presidente de la petrolera y su socio principal.

Ante la situación creada, las dos compañías, según el informe de Anticorrupción, pretendieron "reaccionar por diferentes vías, una de las cuales fue la contratación del Grupo Cenyt —a cuyo frente se encontraba, pese a encontrarse en servicio activo en el Cuerpo Nacional de Policía, el investigado José Manuel Villarejo Pérez— para llevar a cabo una investigación sobre Luis del Rivero y su entorno con la que frustrar el acuerdo que había alcanzado con la mexicana Pemex”.