Reapertura el fin de semana

Restauración aún cerrada en los centros comerciales y miedo a contratar en el comercio

La vuelta a la actividad de los centros comerciales en fin de semana se hace sin restauración y quejas de los comercios por la falta de ayudas

Las transferencias del Gobierno dejan de lado a las tiendas que abordaron rebajas, vendieron más pero tuvieron pérdidas

Colas en el Centro Comercial Glòries

Colas en el Centro Comercial Glòries / ELISENDA PONS

Eduardo López Alonso

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La reapertura de los centros comerciales en Catalunya este fin de semana se produce entre las quejas de la restauración, que seguirá cerrada, y las críticas a las ayudas del Gobierno, que dejan fuera a buena parte del sector comercial. Vuelven a abrir los comercios tras12 meses de pesadilla, semanas acumuladas de cierres y miedo fundado a que un rebrote suponga nuevamente la paralización comercial. Y la reapertura ha dejado de lado a bares y restaurantes, cuya actividad seguirá restringida a los envíos a domicilio. La Asociación de Comerciantes de Centros Comerciales asegura que en el primer semestre del año pasado la actividad estuvo paralizada durante 12 semanas, mientras que este año no se ha podido trabajar durante otras cinco. Desde el 7 de enero, los centros comerciales no han podido abrir sus puertas en fin de semana. En el caso de bares y restaurantes se acumulan cinco meses cerrados.

Según la portavoz de la asociación de bares y restaurantes de centros comerciales, Luisa Muñoz, "la Conselleria de Salut no ha querido hablar. Sí lo ha hecho la Conselleria de Empresa, pero para decirnos que Salut es un muro". El colectivo considera que no existen causas que justifiquen prolongar el cierre de bares y restaurantes en centros comerciales y que si permitan flexibilizar al mismo tiempo la apertura si los establecimientos se sitúan a pie de calle. Este viernes podría conocerse si la demanda presentada a principios de semana por la asociación y de la mano del Gremio de Restauración de Barcelona ha sido admitida a trámite.

La presidenta de la Asociación de Comerciantes de Centros Comerciales, Sonia Plaza, considera que es un alivio volver a abrir las puertas de los comercios en fin de semana, pero advierte de que todas las empresas abordan "con miedo" la reapertura, por temor a un nuevo brote después de Semana Santa que inste a un nuevo cierre. "En estas circunstancias es muy difícil volver a contratar al personal", reconoce Plaza. En su opinión es un escándalo que las ayudas previstas por la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, que exigen una caída de la facturación del 30%, no se adapten a las necesidades del comercio, que quedarán fuera de esas ayudas públicas en la mayoría de los casos. Las tiendas recurrieron el año pasado a la liquidación exagerada de estocs por lo que su facturación bajó a costa de los márgenes. "Lo que va a pasar es que las ayudas se van a dirigir a las empresas que están a punto de cerrar y no a aquellas que intentaron reactivar su actividad pese a la pandemia. Las ayudas deberían haberse destinado al apoyo de las nóminas de los empleados".

Los centros comerciales calculan que existen del orden de 12.000 empleos en riesgo en los centros comerciales. Argumentan que no dejan abrir bares y restaurantes de centros comerciales cuando la estancia mínima es del orden de 1,5 minutos. Sin embargo, en una tienda la estancia media se prolonga unos 30 minutos, en un restaurante es de unos 50 minutos, en un hipermercado puede superar la hora y en el cine las dos horas. Sobre la excusa de que bares y restaurantes pueden incrementar en exceso la afluencia a los centros comerciales, estos informan de que el 60% de la facturación de los establecimientos se generaba antes de la pandemia entre semana y no los fines de semana.

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