Naturgy pierde 347 millones tras una devaluación de activos en plena opa de IFM

Naturgy perdió 347 millones de euros en 2020, en contraste con el beneficio neto de 1.400 millones en 2019, tras una nueva revisión del valor de sus activos de 1.019 millones de euros para proporcionar un valor a su base de activos "más transparente y ajustado a la realidad", según ha informado la compañía en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Es la segunda revisión que realiza en los últimos años, tras una depreciación de 4.851 millones de euros en 2018. En términos ordinarios, Naturgy ganó 872 millones de euros, un 36,7% menos que un año antes.

La compañía que preside Francisco Reynés califica el ejercicio pasado como "uno de los más complicados" que ha vivido, a consecuencia del coronavirus, con una caída generalizada de la demanda energética y una depreciación relevante en países clave de Latinoamérica, mientras el "complejo escenario" del gas natural licuado (GNL) se ha vuelto “más desafiante”. En este contexto, Naturgy realizó un ajuste de 1.363 millones de euros que afectó principalmente a la generación convencional en España (fundamentalmente ciclos combinados) por 1.145 millones de euros y las actividades de gas en Argentina por 198 millones de euros, lo que ha supuesto un impacto de 1.019 en el beneficio neto del grupo.

El Ebitda ordinario fue de 3.714 millones de euros, un 14,6% inferior, impactado por las condiciones mencionadas. A perímetro constante, el Ebitda ordinario sería de 3.964 millones de euros, cumpliendo así con el 'guidance' para 2020 de alrededor de 4.000 millones.

La energética está inmersa en plena opa del fondo australiano IFM sobre el 22,7% de la empresa por 5.000 millones de euros, tema que ha copado gran parte de las preguntas de la conferencia ante los analistas, aunque el presidente de la compañía ha echado balones fuera. Reynés ha subrayado, antes de presentar los resultados, que la oferta de IFM fue "no solicitada" y que Naturgy fue informada "poco antes del anuncio público". "Cualquier cuestión tendrá una respuesta muy limitada porque nuestro conocimiento sobre la oferta es muy débil", ha advertido antes de las interpelaciones de los analistas.

Uno de ellos le ha preguntado por las conversaciones entre Naturgy y su primer accionista, Criteria Caixa: "Yo soy Naturgy y puedo hablar como Naturgy y como su consejo de administración, pero no de parte de los accionistas", ha zanjado Reynés. El primer espada de la energética ha vuelto a insistir en que la compañía "continuará operando el negocio como siempre" por el interés de todos los accionistas, "los actuales y los futuros". Pero, ha anunciado que se pospone sine die el Capital Markets Day, que había anunciado que se celebraría este mes de febrero, para tratar de evitar anticipar una respuesta sobre la posición del consejo de administración ante la oferta de IFM, algo que no se producirá "en un corto plazo de tiempo". Según la compañía, teniendo en cuenta que la oferta se presentará en los próximos días, la opinión del consejo sobre la opa podría llegar "en un par de meses".

Transformación

Naturgy ha informado también que ha identificado casi un centenar de proyectos, que podrían movilizar inversiones de 13.000 millones en los próximos años, ligados a la obtención de los fondos europeos. La compañía invirtió un total de 1.279 millones de euros el año pasado, un 24,1% menos que el año anterior, debido a las menores inversiones de crecimiento en las redes de gas en España por la pandemia.

El 60% de las inversiones se destinaron a crecimiento. La compañía está centrada en su "transformación" hacia nuevos mercados con monedas más fuertes y hacia las energía renovables. Un ejemplo es la reciente adquisición de proyectos renovables en Estados Unidos con la compra de Hamel Renewables, que cuenta con una cartera de proyectos de 8.000 megavatios en energía solar y 5.000 megavatios en almacenamiento. Así como los 235 megavatios (38 MW eólicos y 197 MW fotovoltaicos) adjudicados en la subasta de energías renovables convocada por el Gobierno. También, los avances de la energética en Australia, país que se ha convertido en una pieza clave para la compañía tras aumentar su capacidad renovable hasta los 700 megavatios.

Además, mantiene su apuesta por la rotación de activos como la venta del 96,04% de su participación en la chilena CGE por más de 4.300 millones de euros (EV), confirmando así su capacidad de generar valor para los accionistas. Así como el nuevo acuerdo entre Naturgy, ENI y la República Árabe de Egipto, para resolver las disputas que afectaban a Unión Fenosa Gas (UFG), después de que el anterior se rompiera por el covid, y que se espera completar durante los primeros meses de este año.

La deuda neta se situó en 13.612 millones, casi un 11% menos, sin reflejar aún los ingresos antes de impuestos de 2.570 millones esperados al cierre de la venta de CGE Chile. A cierre del año, la liquidez total del grupo ascendió a 9.475 millones.

Dividendo

Por otra parte, el Consejo de Administración de Naturgy propondrá a la Junta General de Accionistas el pago de un dividendo final contra 2020 de 0,63 euros por acción a abonar durante el primer trimestre de este año. Si los accionistas lo aprueban, este pago su sumará a los dos primeros dividendos a cuenta de 2020; de 0,31 euros por acción y 0,50 euros por acción, respectivamente; que elevarán a 1,44 euros por acción el dividendo total.