Renovación de cargos
Ros aspira a revalidar su liderazgo en UGT en un congreso sin oposición
El actual secretario general de la central repetirá tándem con Matías Carnero, como candidato a la presidencia
Gabriel Ubieto
Redactor
Periodista de economía, centrado en el mercado laboral. He crecido como redactor en El Periódico, pero antes hice prácticas en La Vanguardia y escribí durante seis meses desde Chile para Hemisfèria.cat. Ganador del premio Ramon Barnils (2015) por el reportaje "Els ultres prenen partit".
UGT de Catalunya celebrará su congreso nacional los días 16 y 17 de diciembre y el actual secretario general de la central, Camil Ros, aspira a revalidar el cargo en unas elecciones, de momento, sin oposición. El líder de UGT volverá a formar dupla con el actual presidente de la central, Matías Carnero, y el jueves de esta semana finalizará el proceso de renovación de cargos del sindicato. Las prioridades de Ros para su segundo mandato son insistir en el proceso de recuperación salarial iniciado en el último lustro (y en duda tras la llegada del virus), la reversión de los recortes de la anterior crisis y una primera derogación de parte de la reforma laboral, tal como lo ha explicado Ros en rueda de prensa este lunes.
UGT de Catalunya culminará su proceso de renovación esta semana en un proceso que se ha caracterizado por el continuismo. La federación de industria de la central apostó por reelegir a su ya secretario general, Antonio Rudilla, en función pública también repitió Encarna Fernández y en servicios y comercio fue elegido Óscar López, nuevo en el mandato, pero continuista con la anterior dirección. Ros aspira a revalidar su cargo para los próximos cuatro años, en el que sería su segundo mandato. Si finalmente no se presenta una candidatura alternativa, por estatutos los potenciales rivales tienen margen hasta el mismo día del congreso, y es reelegido, Ros podría postular a un hipotético tercer mandato.
El sindicato celebrará su congreso los días miércoles y jueves de esta semana en el Palacio de Congresos de Barcelona. Está previsto que asistan 400 delegados sindicales, en un espacio con un aforo máximo de 1.600 personas, según ha explicado Ros. La organización interna de la central dispondrá de test de antígenos y gel hidroalcohólico en los accesos. Ros ha considerado que la celebración de dicho congreso es un "ejemplo", de que "se puede mantener la actividad económica y a su vez velar por la salud de las personas", según ha manifestado en rueda de prensa. También ha insistido en que en los anteriores congresos de las tres federaciones no se ha registrado ningún contagio.
Más salarios y menos improvisaciones
Ros ha presentado sus propuestas para el que sería su segundo mandato en UGT, bajo el lema congresual "Aturem, canviem, avancem". La central ha introducido un cambio de colores en sus logos, pasando del rojo histórico de la central a el rojo, el lila (a favor de la igualdad y el feminismo) y el verde (por la sostenibilidad y la transición justa). La voluntad de Ros es continuar presionando para que la crisis del coronavirus no suponga un freno para la recuperación salarial iniciada en el último lustro. "[A los trabajadores] nos tocó pagar toda la vajilla de la anterior crisis económica y no pagaremos esta", ha declarado.
A dos meses de las elecciones catalanas del 14 de febrero, el secretario general de la UGT ha avisado al próximo Govern que salga escogido de las urnas de que "no le perdonaremos improvisaciones"; en relación a episodios anteriores como las ayudas de autónomos. También ha instado al próximo Govern a que revierta los recortes presupuestarios de la anterior crisis, especialmente en sanidad. "Si tenemos unas ucis llenas es porque tenemos unas ucis más pequeñas que en el resto de Europa. Y eso es porque hemos dejado de invertir", ha manifestado.
A favor de la jornada de cuatro días
El que aspira a revalidar su cargo como secretario general de UGT ha defendido la idoneidad de abrir el debate de la jornada laboral de cuatro días. Ros defiende reducir la jornada a 32 horas semanales y destinar el quinto día a la formación de los trabajadores. Una idea mediatizada por el vicepresidente de asuntos sociales Pablo Iglesias y que ha recibido el rechazo frontal de las patronales, tanto la española CEOE como la catalana Pimec. "Las patronales solo quieren recibir ayudas, pero no quieren ni subir salarios ni pagar más impuestos", ha criticado Ros. "Deberían de dejar de ejercer como lobi de cuatro sectores y actuar verdaderamente como patronales", ha añadido.
El actual líder de UGT en Catalunya también ha considerado necesario plantear la introducción de una renta básica universal, que supere las actuales limitaciones de subsidios como el Ingreso Mínimo Vital. "El futuro ha de ir por aquí", ha defendido.
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