A PARTIR DE ESTE MARTES EN BARCELONA

El fabricante de Thermomix lleva a juicio a Lidl por plagio

El grupo Vorwerk lleva a juicio a Lidl por la patente de la Thermomix

El grupo Vorwerk lleva a juicio a Lidl por la patente de la Thermomix (en la foto). / periodico

Eduardo López Alonso

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El grupo alemán Vorwerk, fabricante del robot de cocina Thermomix, ha llevado este martes a juicio a la cadena de supermercados germana Lidl por presuntamente vulnerar una patente al importar y comercializar en España un electrodoméstico similar, el Monsieur Cuisine Connect. 

En el proceso, el grupo alemán alega que Lidl ha violado su patente y exige una indemnización de daños y perjuicios del 10% sobre el importe bruto de la cifra de ventas de los productos presuntamente infractores.

El robot de cocina de Lidl se ha convertido en un éxito de ventas, que es difícil de comprar en la práctica ya que se agota en cuanto el 'discount' alemán lo pone a la venta. El juicio, que se celebra en el Juzgado Mercantil número 5 de Barcelona, en la Ciudad de la Justicia, ha empezado este martes y está previsto que se presenten las conclusiones este jueves.

La causa surge de la demanda que el grupo Vorwerk & Co Interholding GMBH, titular de la patente 'Máquina de cocina', más conocida como Thermomix, puso contra Lidl al considerar que plagiaba su robot de cocina con el Monsieur Cuisine Connect, que comercializa en España bajo la marca propia SilverCrest.

A diferencia de la Thermomix de Vorwek, cuyo precio supera los 1.250 euros, la de Lidl salió al mercado por un coste casi tres veces menor -unos 360 euros- pero con especificaciones parecidas, lo que ha hecho que se agotaran sus existencias en pocas horas cada vez que se ha puesto en venta. Otras marcas, como Moulinex, Cecotec y otras, comercializan robots de cocina similares a la Thermomix pero con precios considerablemente más bajos aunque especificaciones técnicas similares. Existen algunos por poco más de 200 euros. Lo que hace a los robots de Lidl y Thermomix bastante parecidos es su capacidad para conectarse a internet para seguir las recetas, ya que la utilización de aspas rotativas y calor en un solo aparato es común a otros muchos dispositivos de este tipo. 

Diferenciación técnica

En la primera jornada del juicio, los peritos han explicado desde un punto de vista técnico las diferencias de cada producto. Uno de los elementos que diferencia a Thermomix frente a la competencia es la capacidad de pesar con precisión (de un gramo) mientras se está cocinando, mientras que en otros sistemas se requiere parar la máquina para realizar el pesado de ingredientes que se van añadiendo en el recipiente mezclador. Esa invención haría a la Thermomix diferente de otros robots de cocina. En la máquina de Lidl no es posible pesar mientras se cocina.

La parte demandante es el grupo Vorwerk & CO. Interholding GMBH. Este grupo es el titular de la patente española ES2301589, que es una validación de la patente europea EP 1269898, que lleva por título el genérico "Máquina de cocina". Vorwerk considera que su patente EP898 está siendo vulnerada por los supermercados Lidl. Ejercita así una acción de "violación" de su patente y una petición de indemnización de daños y perjuicios. Lidl niega que su producto infrinja la mencionada patente y, además, dirige a su vez frente a Vorwerk  una "demanda reconvencional" solicitando la declaración de nulidad de la patente EP898  por "falta de novedad", por "falta de actividad inventiva" y por "adición de materia". También manifiesta la improcedencia de la pretensión resarcitoria de la actora. 

El perito Santiago Dávila se explayó este martes en su declaración sobre su propio informe pericial reduciendo a apenas técnica lo que son este tipo de robots de cocina: aspas, báscula y calor. Y circuitos y electrónica. Nadie hablo que posicionamiento comercial o servicios al cliente. O cuotas de mercado. O satisfacción de los clientes. O precios. Misma función y distintas alternativas a la venta en el mercado.

Al margen del meollo del debate este martes ante el juez en este mero debate técnico, lo cierto es que la demanda de Vorwerk podría interpretarse como una forma de ganar tiempo ante una competencia que cada vez es mayor y que pone en dificultades el modelo de negocio con más de 40 años de vida de esta firma. En España se vendieron unas 150.000 unidades Thermomix el último año. 

La diferencia de precio entre el electrodoméstico Thermomix y sus competidores se asienta en el propio sistema de ventas, basado las llamadas 'demostradoras', vendedoras que visitan la vivienda del cliente para hacer una demostración de la máquina. Irrumpir en el hogar del cliente acelera la decisión de compra y crea vínculos entre la marca y sus fieles compradores. Además, solo los clientes con capacidad adquisitiva suficiente son capaces de asumir la entrada en su cocina de un extraño. Sin embargo, la máquina de Lidl destrozó los planes de negocio futuros de Thermomix, que confiaba en potenciar la suscripción de pago a su servicio de internet Cookidoo, de acceso de recetas de cocina a través de internet. Este servicio cuesta 36 euros al año y da acceso al portal digital oficial de recetas de Vorwerk. Las recetas se almacenan en la máquina del cliente (en torno a un centenar) cuando se descargan, pero desaparecen si se da de baja del servicio de pago.  En la máquina de Lidl, el libro de recetas de internet es accesible con la máquina, al margen de que la guía por pasos no ofrece exactamente la misma funcionalidad. 

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