sector financiero

El Banco de España lamenta que la banca no dé todo el crédito que puede

El gobernador insta al sector a usar el capital liberado por las autoridades para dar más préstamos

Los bancos urgen a eliminar las empresas "zombis" para transformar el tejido productivo

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos / EFE / ZIPI

P. A.

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El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha lamentado este lunes las "reticencias" que tienen los bancos a echar mano del capital que las autoridades europeas les han autorizado a utilizar de forma excepcional para aumentar el crédito. "El uso de los colchones de capital es un elemento absolutamente fundamental en la lucha contra los efectos económicos de la pandemia y para lograr que la recuperación sea más sólida", ha sostenido.

Las entidades, ha reconocido, tienen miedo al "efecto estigma", es decir, a que el mercado encarezca sus costes de financiación por utilizar dichos colchones de capital. También ha admitido que los bancos temen que las autoridades les obliguen a reconstruirlos de forma demasiado temprana y rápida, así como que su solvencia caiga a los niveles que le impedirían pagar el dividendo a sus accionistas y los intereses de sus emisiones de deuda.

Por ello, Hernández de Cos ha considerado "crucial" que las autoridades bancarias comunitarias hagan una "comunicación clara" sobre la posibilidad de usar dichos colchones de capital y la "flexibilidad en su reconstrucción posterior", al tiempo que les ha instado a "valorar, en su caso, la adopción de medidas adicionales". Pese a ello, el consejero delegado del SantanderJosé Antonio Álvarez, ha sostenido que los "bancos solo van a usar los colchones en caso de extrema necesidad, que es cuando están destruyendo capital".

Morosidad y 'zombies'

En unas jornadas de 'El Economista' y Accenture, el gobernador también ha advertido de que la morosidad bancaria registrará un "aumento significativo" en los próximos trimestres "incluso en el escenario más benigno" de evolución económica. El aumento de los impagos, ha destacado, ha sido "muy contenido" hasta ahora gracias a las medidas públicas de apoyo a empresas y familias, pero acabará siendo más pronunciado, por lo que las entidades "deben persistir" en el incremento de las provisiones para hacer frente a las futuras pérdidas.

En una línea similar, el presidente de la patronal bancaria AEB, José María Roldán, ha alertado de la necesidad de "minimizar la existencia de empresas zombis", es decir, aquellas que se han tornado inviables por la crisis y cuya existencia se sostiene por ahora gracias a las medidas de apoyo público. Es necesario dejarlas caer, ha argumentado, porque obstaculizan la transformación hacia un nuevo tejido productivo más "digital y verde (ecológicamente sostenible)". 

Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, también ha previsto que los impagos crezcan, pero sin llegar a los niveles de la crisis anterior (13,61% en diciembre del 2013). En este contexto, ha defendido, "tiene todo el sentido ampliar el periodo de carencia" en los créditos a empresas avalados por el Estado a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) más allá del año previsto inicialmente.