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Tímida recuperación comercial en julio, en plenas rebajas

Comercios cerrados en la calle de Ferran de Barcelona, el viernes pasado, 7 de agosto

Comercios cerrados en la calle de Ferran de Barcelona, el viernes pasado, 7 de agosto / JORDI COTRINA

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Las ventas del comercio minorista bajaron en julio el 3,7% respecto del mismo mes del año pasado, con lo que este indicador interanual encadenó su quinto mes consecutivo a la baja tras el estallido en marzo de la pandemia del covid-19, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La recuperación de la actividad comercial tras el cierre del primer trimestre se produce de manera progresiva y clara, pero con pocas esperanzas de un alza que permita enmendar el cierre anual. El índice de ventas minoristas está en franco crecimiento tras el desplome entre diciembre y abril. En términos mensuales, el comercio minorista aumentó la facturación en el mes de julio el 1,1% en plenas rebajas de verano para muchos comercios. Con este avance mensual de julio, el comercio minorista encadena tres meses consecutivos de aumentos en su facturación, aunque el de julio ha sido el más moderado de los tres, pues en mayo y junio se registraron aumentos del 19,4% y del 17,7%, respectivamente.

El INE destaca que "con respecto a junio se observa un mayor dinamismo del pequeño comercio, con crecimientos del 2,8% en empresas unilocalizadas y del 3,1% en pequeñas cadenas. Por el contrario, grandes cadenas (−1,2%) y grandes superficies (−0,9%) reducen las ventas". Esos datos del INE vienen a corroborar en parte los de las principales consultoras de gran consumo, que han resaltado en las últimas semanas la mayor resistencia del comercio de proximidad a la hora de encarar la caída del consumo de las familias. Grandes superficies y centros comerciales tienen más problemas para atraer a los consumidores.

Las ventas minoristas son las realizadas por los comerciantes directamente a los consumidores finales, y son un un indicador clave para evaluar la situación general de la economía, y especialmente en términos de evolución de demanda y del empleo. Los índices desestacionalizados permiten analizar el sector una vez eliminados todos los efectos de calendario. Una evolución positiva en términos mensuales muestra recuperación, pero la comparación con el mismo mes del año anterior refleja un elemento más fideligno para describir la situación económica general. 

Comparando con el mes de julio del año pasado, los datos del INE (que incluyen áreas de actividad más allá de productos de gran consumo) reflejan el impacto de las restricciones de movilidad y el desplome de la llegada de turistas extranjeros. La estadística corrobora que el mantenimiento del teletrabajo en las empresas y el descenso del turismo son un lastre para la actividad comercial, especialmente en el centro de las ciudades.

Dependencia turística

Por comunidades, las ventas bajaron en tasas anuales en 12 y subieron en cinco, influidas por el cambio de comportamiento del turismo y el desplome en la llegada de viajeros internacionales. Así, las únicas autonomías en las que las ventas se incrementaron fueron Asturias (2,3%), País Vasco (1,9%), La Rioja (1,9%), Castilla-La Mancha (0,8%) y Galicia (0,5%), regiones por las que se decantaron un mayor número de viajeros que residen en España. Sin embargo, las comunidades tradicionalmente dependientes del turismo extranjero fueron las que más sufrieron, con retrocesos del 14,8% en Baleares, del 13,2% den Canarias, del 5,5% en Catalunya y del 5,1% en Andalucía.

El empleo cayó en todas las comunidades autónomas, lideradas también por las más turísticas: Baleares (11,4%), Canarias (5,8%) y Andalucía (4,3%). Los descensos menos acusados correspondieron a Aragón (0,9%), La Rioja (1,4%) y el País Vasco (1,5%). Por formatos comerciales, la contratación bajó el 5,2 % en las estaciones de servicio, el 3,6 % en las empresas unilocalizadas, el 8,2% en las pequeñas cadenas, el 0,3% en las grandes cadenas y el 3,6% en las grandes superficies.

 Por productos, la rúbrica de equipo personal (−21,9%) sigue manteniendo la mayor bajada en tasa anual, mientras que equipo del hogar (6,1%) registra el mayor aumento (las tiendas de decoración y similares incrementan las ventas).

El comercio 'on line' presenta un incremento anual del 19,9%. "No obstante, con la nueva normalidad pierde fuerza y desciende un 25,7% respecto a junio", destaca el informe del INE.

Evolución

En el acumulado de los siete primeros meses del año, el comercio ha vendido el 9,5% menos, con descalabros que en abril, mes en el que llegó a paralizarse toda actividad no esencial durante 15 días, llegaron a superar el 30%, según los datos del INE, que revelan que en julio el empleo en el sector bajó en tasas interanuales el 3,6% y también sumó cinco meses de caídas.  En marzo, coincidiendo con el inicio del estado de alarma, el comercio minorista redujo su negocio el 14,7%, mientras que en abril la caída fue del 31,5%, y en mayo del 20,1%. En junio, con el inicio de la desescalada el sector se recuperó y suavizó su bajada al 3,3%. Tras el fin del estado de alarma el 21 de junio y la posibilidad de desplazarse por todo el territorio nacional con libertad, las ventas subieron en julio respecto a junio el 1,1% (descontados efectos del calendario), en tanto que el empleo repuntó el 0,9%.

Por modos de distribución, el pequeño comercio vendió el 2,8% más respecto a junio y el 3,5% menos respecto a julio del 2019; mientras que las pequeñas cadenas remontaron el 3,1% en tasas intermensuales y retrocedieron el 11,4% en interanuales. Las grandes cadenas vendieron el 0,2% más frente a julio del año pasado, en tanto que frente a junio vendieron el 1,2% menos. Las grandes superficies rebajaron su negocio el 0,9% frente a un mes antes y el 3% frente a un año antes.