Empleo

Los rebrotes y el pinchazo turístico anticipan una nueva ola de ertes

Multitud de hamacas vacías en la playa de Magaluf (Mallorca), uno de los principales destinos del turismo británico en años anteriores, el pasado 30 de julio

Multitud de hamacas vacías en la playa de Magaluf (Mallorca), uno de los principales destinos del turismo británico en años anteriores, el pasado 30 de julio / periodico

Gabriel Ubieto

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Gran parte del sector turístico español ha puesto punto y final a la campaña de verano antes de acabar la tercera semana de agosto. La extensión de los rebrotes y los mensajes de gobiernos como el alemán de desaconsejar a sus ciudadanos el viajar a España han sido la puntilla para uno de los antaño tractores de la economía española.

Fin de temporada y fin del empleo, que en territorios como Baleares ya está a punto de traducirse en una segunda ola de ertes. Las nuevas suspensiones iniciadas en el sector turístico amenazan con extenderse a otros sectores ante el riesgo de nuevos rebrotes, que en territorios como Euskadi ya han obligado a declarar la emergencia sanitaria. En septiembre, Gobierno, patronal y sindicatos volverán a sentarse para negociar una cuarta prórroga de los ertes de la covid (más allá del límite acutal, del 30 de septiembre) que algunas voces ya piden que sea hasta primavera.

Los primeros en dar por cerrada la escasa temporada turística han sido los baleares. El Govern liderado por Francina Armengol ha instado a las empresas hoteleras a que se acojan a expedientes de causa de fuerza mayor, los que garantizan mayores exoneraciones de cotizaciones, y que aduzcan para ello la decisión de la administración Merkel. 

La del gobierno balear es una interpretación novedosa de la ‘cláusula por rebrotes’ incorporada en el último acuerdo de renovación de los incentivos públicos a los ertes de la covid, firmado a finales de junio. Allí se estableció que podrían ser declarados ertes por fuerza mayor aquellos vinculados a cierres o caídas drásticas de la actividad provocados por decisiones administrativas. No se especificó que tipo de administración y el Balear interpreta que aunque sea extranjero (caso de Alemania) cabe aplicar esa ‘cláusula por rebrotes’. Una interpretación que han comenzado a seguir en otras comunidades autónomas, como Valencia. Según avanza Europa Press, la Generalitat Valenciana distribuye estos días una circular en la que recuerda a las empresas la existencia de la 'cláusula por rebrote'.

El Ministerio de Trabajo no ve mal esta interpretación. "Se valora expediente por expediente. Lo que deben justificar las empresas es si las nuevas medidas y restricciones impiden el desarrollo de la actividad", explican desde Trabajo. Es decir, si un hotel puede acreditar que su actividad depende de que vengan turistas alemanes, podrá obtener acceder a un erte por causa de fuerza mayor y ahorrars el 60% de las cotizaciones sociales hasta el 30 de septiembre.

Gran parte de las empresas del sector hotelero balear están ultimando nuevos ertes, a la espera de activarlos a partir del próximo 23 de agosto, fecha en la que el Gobierno alemán revaluará su recomendación de no viajar a España. Las compañías ya están negociando con la parte sindical estos expedientes, por si las cancelaciones no se revierten, tal como explica la secretaria de la federación de servicios de CCOO en Baleares, Sílvia Montejano. La activación de los ertes tampoco puede ser automática, ya que actualmente todavía quedan turistas en vías de agotar su estancia.

Catalunya, en un punto de inflexión

En Barcelona los pocos hoteles que han abierto en verano esperan poder aguantar su actividad hasta los meses de septiembre y octubre, los de mayores ingresos tradicionalmente en la capital; según explica el director del Gremi d’Hotels de Barcelona, Manel Casals. "Damos por hecho que este año apenas se celebrarán congresos y ferias. Si a nivel sanitario la situación empeora los que hayan abierto tendrán que volver a los ertes", apunta. "La temporada no ha sido mala, ha sido nefasta. Lo peor vendrá si no se celebran los pocos congresos que todavia no se han cancelado”, coincide el responsable de hostelería de UGT, Jesús Lodeiro.

La reactivación del empleo congelado en los ertes iniciada en los últimos compases del estado de alarma se ha alargado, de momento, hasta las primeras semanas de agosto. El 14 de agosto (antes de el cerrojazo alemán) quedaban en erte 880.000 trabajadores, según los últimos datos de la Seguridad Social. ¿Continúa esta reactivación en la tercera semana de agosto? Desde Seguridad Social no facilitan cifras al respecto, aunque desde los sindicatos no descartan nada.

"Depende de los territorios, en sitios como Lleida el rebrote de julio hundió todas las reservas. En otros sitios de interior todavía han conseguido salvar algo con el turismo nacional", apunta el director de relaciones institucionales de Pimec, Àngel Hermosilla. "De momento los mecanismos de prevención en los centros de trabajo están aguantando", apunta la secretaria de acción sindical de CCOO de Catalunya, Cristina Torre.

"Si no empeora la situación sanitaria, más que ertes lo que vendrá son otras figuras más complicadas", reconoce Hermosilla; haciendo referencia indirecta a la cascada de eres que se espera en otoño. La culminación de los despidos y la reapertura de colegios preocupa mucho en las centrales. Este último elemento tanto por los contagios entre los niños, como las ausencias que puedan causar sus padres para cuidarlos.

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