MEDIOAMBIENTE

¿Te resulta más fácil aplastar las latas? No te has puesto más fuerte, es gracias al ecodiseño

5335-054

5335-054 / periodico

Cecilia Vega

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

¿Se han fijado en que las latas de refrescos de ahora no son como las de antes? Tiempo atrás era muy difícil poder aplastarlas y ahora, sin embargo, todos podemos hacerlo. Esto es así porque se ha reducido la cantidad de material empleado, haciéndolas más ligeras pero igual de seguras. También pesan menos y han cambiado la forma de los envases de yogures, de detergentes o de los briks de leche. Además, cada vez más empresas incluyen en sus productos material reciclado y en los lineales de los supermercados encontramos botellas de agua hechas a partir de otras botellas recicladas, botes de crema compuestos por plástico PET reciclado, latas de bebidas que antes fueron otras latas…

Los envases que consumimos a diario han cambiado casi sin que nos demos cuenta. Y no hablamos de algo meramente estético. Las compañías han respondido al reto global de la sostenibilidad implementando medidas de ecodiseño que han reducido el impacto ambiental asociado a la producción, distribución, uso y gestión como residuo de los envases que ponen en manos de los consumidores.

En concreto y según datos de Ecoembes, la organización ambiental que coordina el reciclaje de envases en España, en los últimos 20 años y gracias al trabajo desarrollado por la entidad y las empresas en esta línea, se han ahorrado un total de 581.824 toneladas de materia prima en la fabricación de envases. Esto significa que, desde 1999, gracias al ecodiseño se ha conseguido evitar el consumo de más de 22 millones de MWh de energía. 

El rol de las empresas catalanas

Es evidente, por tanto, el rol tan importante que juegan las empresas en la lucha contra el cambio climático. Más de 12.500 forman parte de Ecoembes, de las que 2.557 se encuentran en Catalunya. Estas compañías financian el sistema de reciclaje en nuestro país: el ‘Punto Verde’ que encontramos en los envases (un símbolo ambiental verde con dos flechas circulares) significa que las empresas que ponen envases en el mercado pagan para que estos, una vez utilizados, se reciclen en los contenedores amarillos y azules, cumpliendo con la ley 11/97 que así lo estipula.

Y no solo eso: su compromiso con el medioambiente va más allá, realizando una apuesta decida por la innovación en materia de ecodiseño. Es el caso de la cadena de establecimientos de productos frescos y alimentación Ametller Origen. Sus medidas para promover “una vida más sostenible y saludable” se engloban dentro del “movimiento #FemOrigen”, como explica Amaya Prat, directora I+D+i & Sostenibilidad de la compañía.

Se trata de acciones o “semillas” que giran en torno a cuatro objetivos estratégicos: “Uno sería el envase circular, basado en el ecodiseño, rediseñando para reducir, para reciclar y para reaprovechar todo lo que podamos”, subraya. A este, se unirían además “la lucha contra el desperdicio alimentario, la compra consciente y sostenible, y la aplicación de sostenibilidad corporativa a toda la cadena de valor (utilización de energía verde, cierre de murales de frío, etc.)”, añade. Fue en 2018 cuando se aventuraron en el ecodiseño, en una de sus gamas de yogur, gracias al apoyo de Ecoembes. “Nos resultó muy útil para aplicar esta metodología en el ciclo de vida de los envases y, a partir de entonces, estamos revisando y rediseñando, vamos reduciendo los materiales en el 'packaging' y elegimos opciones reciclables o compostables”. 

Lo podemos comprobar ya en su línea de lácteos con envases de cartón reciclado y en la nueva presentación de los tomates cherry o su gama de embutidos loncheados. En el primer caso, “se ha cambiado el vaso con tapa, elaborado con dos materiales plásticos, por una caja de cartón compostable” y, en el segundo, “hemos reducido un 17% el envase interior y, el exterior, lo sustituimos por material también compostable”, explica la responsable de sostenibilidad.Además, esta cadena ha puesto en marcha un proyecto piloto de compostadores de orgánico en las tiendas, “que queremos ampliar para aplicar los principios de economía circular y poder algún día abonar nuestros campos con nuestros residuos”, apunta Prat.

Se trata, en conjunto, de medidas pensadas para cuidar el medio ambiente, impulsar la economía circular y devolver los residuos a la cadena de valor, primando además la atención al origen y la calidad de los productos. Una filosofía por la que abogan también los supermercados ALDI, empresa con sede social en Barcelona que destaca por ofrecer un surtido cada vez más amplio de envases sostenibles y reciclables en sus artículos de marca propia.

Tal y como queda reflejado en su Memoria de Sostenibilidad 2019 y subraya Eduardo Mas, director de Calidad y Responsabilidad Social de ALDI España, esta cadena “hace suyos el compromiso de hacer más sostenible toda su cadena de valor y favorecer el consumo responsable con el objetivo de facilitar a los clientes una compra responsable, segura y con conciencia”.

En este sentido, algunas de las medidas implementadas en los envases en el último año son “la incorporación de cápsulas de café compostables, la sustitución de los envases de plástico por cartón en los huevos y en los envases secundarios de leche de marca propia Milsani y Gutbio, el rediseño de productos como, por ejemplo, bastoncillos de algodón con papel sostenible y algodón orgánico o productos de limpieza e higiene que contienen un 70% menos de plástico que los envases convencionales", enumera Mas.

Con estas medidas –señala el director de Calidad y Responsabilidad Social-, “ALDI ahorró en 2019 más de 1.100 toneladas de plástico virgen y casi 1 tonelada de aluminio”. Por otro lado, “la apuesta de la compañía por la compra exclusiva de energía verde, la instalación de sistemas de iluminación LED, la generación de energía renovable mediante paneles fotovoltaicos o el uso de refrigerantes más sostenibles” en sus supermercados ha contribuido a una “reducción del 50% en la emisión de gases de efecto invernadero desde 2015 en España”, detalla Mas.

“Estos compromisos son cada vez más valorados, y a la vez demandados, por los consumidores”, destacan desde ALDI. Un punto en el que coinciden desde Ametller Origen: “Nuestros consumidores están en general muy concienciados y nos piden a las marcas que vayamos por esta línea y hagamos un esfuerzo”.