Empleo

El teletrabajo de emergencia no entusiasma, pero el 80% de trabajadores no concibe volver igual a la oficina

Las jornadas laborales a distancia se dilatan durante el confinamiento y los expertos alertan del desgaste que ello puede provocar a largo plazo

zentauroepp52807539 opinion  teletrabajo200419164620

zentauroepp52807539 opinion teletrabajo200419164620 / periodico

Gabriel Ubieto

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El teletrabajo ha sido la salida de emergencia que muchas empresas han aplicado durante el confinamiento para continuar su actividad, pero las prisas no han sido buenas consejeras en la mayoría de casos. Y es que menos de un tercio de los trabajadores que pasaron a ejercer a distancia afirman hacerlo más cómodamente que en la oficina. Así lo constata un informe elaborado por Eada Business School, en base a una muestra de 600 trabajadores que han operado desde que comenzó la pandemia desde sus casas. A las puertas de una nueva regulación que prepara el Gobierno sobre el trabajo a distancia, el informe alerta de que el teletrabajo está siendo sinónimo de jornadas más dilatadas y problemas para separar la vida profesional de la personal. A expensas de conocer más detalles de esa nueva normativa, patronal y sindicatos ultiman sus propuestas para tratar de no desvirtuar una modalidad de trabajo que el 80% de los encuestados considera que ha venido para quedarse.

En la "vieja normalidad" el teletrabajo era un fenómeno excepcional en las empresas españolas y la pandemia ha sido la primera experiencia para la mayoría. El informe de Eada señala que solo el 7,8% de los empleados que pasaron a ejercer desde casa teletrabajaba previamente más de cuatro días a la semana desde su casa. El contagio masivo del teletrabajo ha provocado, no obstante, que muchas casuísticas no estuvieran contempladas, como quién costeaba las herramientas de trabajo, cuales eran los límites de la desconexión digital o qué espacios se habilitaban. Pues el 42% de los encuestados por Eada afirma tener problemas de concentración por interrupciones familiares y el 33% afirma no tener un espacio adecuado para trabajar.

"Se ha hecho un teletrabajo de emergencia sin ningún tipo de formación", señala la secretaria de acción sindical de CCOO de Catalunya, Cristina Torre. Esa falta de protocolos ha provocado, por ejemplo, que aumenten los tiempos que está disponible el trabajador para la empresa y solo el 19,1% de los encuestados por Eada afirma haber respetado el horario que tenía en la oficina. Lo que ha provocado, entre otros, que la mitad de los encuestados reconociera tener problemas para separar la vida profesional de la personal. En este sentido, la profesora de Eada y coautora del estudio, Aline Masuda, explica que multinacionales como IBM abordaban problemas de este tipo facilitando a sus empleados el acceso a coworkings cercanos a sus domicilios. Lo que también permite a las empresas garantizar una infraestructura, como por ejemplo sillas de trabajo homologadas, que cumpla con las normativas de prevención de riesgos laborales. El estudio de Eada ha sido elaborado por Aline Masuda, en coordinación con los investigadores Edgar Quero y Luciano Strucchi.

Nuevos protocolos por definir

"Hay muchas cuestiones que son mejorables y tenemos que abordarlas", apunta el responsable de relaciones laborales de Foment del Treball, Javier Ibars. Establecer protocolos para la protección de datos o negociar qué pasará con todos aquellos complementos salariales asociados a la presencia del trabajador en la empresa (como la peligrosidad, la puntualidad, el ticket restaurante, etc.) son algunas de ellas. Otra es controlar los índices de productividad y adaptarlos a unos mínimos. 

En este sentido, la coautora del estudio explica que muchas empresas han transitado hacia el trabajo por objetivos como alternativa al control presencial de la jornada. Algo que, no obstante, no en todos los casos ha sido suficientemente planificado. "Las empresas deberán hacer un esfuerzo para definir los objetivos y pensar en la carga de trabajo que estos suponen, más allá de establecer un horario fijo", considera Masuda. Uno de los posibles efectos de esa sobrecarga de trabajo es que el aumento de productividad en los primeros meses de teletrabajo se puede traducir en un brusco descenso en los meses posteriores, ante el efecto ‘quemado’ que puede experimentar el empleado. “Lo que no sería razonable en un centro de trabajo no debe serlo en el teletrabajo”, declara la secretaria de acción sindical de CCOO de Catalunya.

Planificar la "nueva normalidad"

Pese a los problemas detectados por Eada en su informe, la gran mayoría de los trabajadores que han experimentado estos últimos meses el teletrabajo no conciben volver sin más a la oficina. Solo el 15,6% de los encuestados considera que tras la pandemia las empresas volverán a los mismos horarios y métodos de organización de antes. Y el 80% considera que su empresa debería implementar algún tipo de opción de teletrabajo en el futuro.

En este sentido, y en paralelo a la nueva normativa que está definiendo el Ministerio de TrabajoGeneralitat, patronales y sindicatos están estudiando una propuesta conjunta al respecto. La voluntad es que esta sirva de referencia a sus asociados y que el Gobierno central incorpore dichas recomendaciones.