Nissan Europa se esconde en la reorganización para justificar el cierre de Zona Franca

Gianluca De Ficchy, presidente de Nissan Europa, ha querido salir al paso de las múltiples reacciones tras el anuncio de la compañía del <strong>cierre de la planta de la Zona Franca </strong>de Barcelona. En la línea de lo argumentado por su 'jefe' en Japón, Makoto Uchida, De Ficchy se ha escudado en la reorganización de la Alianza con Renault y Mitsubishi para justificar el cierre de una planta a la que la propia compañía había dejado languidecer con un 20% de su capacidad productiva.

El presidente de Nissan Europa ha hecho suyas las palabras de Uchida para señalar que "la decisión de cerrar llega tras un extenso estudio para mitigar el exceso de capacidad de producción y mejorar la competitividad general. Esta no es una decisión que estamos tomando a la ligera, sino que es para asegurar el futuro más sólido posible para la marca".

De Ficchy ha querido asumir el compromiso de "debatir el plan con total transparencia y respeto para todos los empleados, y escuchar las opiniones de los representantes de la plantilla, los empleados y todos nuestros socios en Catalunya y en toda España". No será tarea fácil porque muchos de ellos se sienten profundamente traicionados por la compañía. 

De la mano del anuncio del cierre también llega Frank Torres, el vicepresidente de producción de Nissan en Rusia y otrora responsable de Nissan Motor Ibérica, que será el encargado de pulir la sentencia a muerte de la planta barcelonesa. Torres deberá asumir el diálogo, si cabe, y el entierro con los sindicatos ya que ahora es el nuevo responsable de Motor Ibérica tras reemplazar hoy mismo a Genís Alonso, actual director.

Se abre ahora un periodo de consultas para tratar todos los temas que permitan cerrar, con suerte en diciembre, la trayectoria de Motor Ibérica tras cien años de historia. "España siempore ha sido y sigue siendo uno de los mercados más importantes para la marca en Europa", señala De Ficchy. Y añade que Nissan Iberia, que dirige Marco Toro (y que no tiene que ver Motor Ibérica que es la parte industrial), mantendrá la organización comercial, de ventas y de márketing juntoa la red de concesionarios.