Xarcuteries Bosch, la sexta generación contra el Covid-19

Artesanos desde el 1863, la sexta generación la familia propietaria de Xarcuteries Bosch de Barcelona capea la pandemia del coronavirus con esperanza, energía y de la mano de los empleados. Son conscientes de que, sin la dura dedicación de todos, el servicio público que ofrecen los trabajadores de las empresas privadas del comercio sería imposible normalizar la distribución de productos de alimentación.

Actualmente son Jordi y Xavier Bou Bosch los gerentes de la empresa. Desde el mercado municipal del Clot, el negocio literalmente centenario se ha expandido y son ya cinco los puntos de venta. Con el brote de coronavirus la reorganización de la empresa llegó de manera súbita y con lógicos miedos de la plantilla, unas 50 personas, que tuvieron que ser amortiguados con medidas de seguridad acordes a las circunstancias.

"La primera decisión que tomamos fue separar los turnos de trabajo en dos equipos paralelos y alternos, para ampliar el espacio de trabajo", explica Xavier. Aunque la jornada laboral se ha recortado, los salarios se han mantenido íntegros y está sobre la mesa la distribución de un plus por la dedicación de la plantilla durante estos días. "El sector de la alimentación es muy importante y el personal tiene que ser consciente y estar orgulloso del trabajo que hace", explica Xavier Bou.

"Aparecieron momentos de nervios y normales crisis de ansiedad en los primeros días de confinamiento. Había miedo y trabajar con mascarilla y guantes tantas horas al final pasa factura. La gente tiene que ser consciente del esfuerzo que estamos haciendo los comercios y los dependientes y la importancia del papel que tenemos en estos momentos de confinamiento", explica con un punto de emoción Bou. 

Como empresa, Xarcuteries Bosch había apostado antes del brote por el crecimiento con una nave de 500 metros cuadrados para la elaboración de productos propios y afrontar un creciente negocio de cátering. En pleno confinamiento, las ventas han aumentado incluso. La actividad de cátering cesó de inmediato y se puso en marcha una app para que los clientes pudiesen encargar las compras y tenerlas listas. De esa manera se acorta el momento de la compra, las colas y los riesgos de contagio. 

En opinión de Xavier Bou, el poso de la crisis del coronavirus será más profundo de lo que pueda pensarse. Reconoce que las elevadas medidas de seguridad sanitaria en el comercio e industria alimentaria actuales van a consolidarse y el uso de mascarillas y medidas de asepsia han llegado para quedarse.  

Sobre hábitos de consumo, Xarcuteries Bosch ha percibido también los cambios que han constatado las grandes firmas de análisis de mercados. Los clientes están comprando productos frescos para su elaboración en casa. Menos libritos confeccionados y más carne para hacerlos en casa. Ha aumentado el tícket medio de compra. Pollo, ternera, cerdo, quesos, productos para pasar un rato en la cocina. Sí que ha caído en picado la venta de jamón cortado e incluso se ha llegado a retirar de la venta en alguna de sus tiendas temporalmente. Es momento de cortar a máquina.