consecuencias del coronavirus

La banca lanza una moratoria hipotecaria de hasta doce meses

Ana Botín, Carlos Torres Vila, Jordi Gual, Josep Oliú y José Ignacio Goirigolzarri

Ana Botín, Carlos Torres Vila, Jordi Gual, Josep Oliú y José Ignacio Goirigolzarri / periodico

P. Allendesalazar

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La banca ha anunciado este lunes su propia moratoria hipotecaria para personas que hayan visto caer fuertemente sus ingresos a causa del coronavirus pero que no cumplan los criterios para beneficiarse de la aprobada por el Gobierno para colectivos vulnerables, además de una moratoria en los créditos al consumoComo ya adelantó este diario, las entidades llevaban tiempo preparando la iniciativa y quedaba por decidir las condiciones y si se anunciaba como una medida sectorial. Finalmente, las dos grandes patronales -la AEB (bancos tradicionales) y la CECA (antiguas cajas de ahorro)- han publicado un comunicado conjunto.

Para posibilitar un acuerdo, las entidades asociadas a estas organizaciones han decidido fijar unos máximos que les dejan espacio para actuar de forma individual. La moratoria, así, consiste en un aplazamiento de "hasta" doce meses en el pago del capital (no de los intereses y demás costes) de la hipoteca sobre la primera vivienda de aquellas personas afectadas "económicamente" por la pandemia que así lo soliciten. En los préstamos personales, el diferimiento máximo será de seis meses. Se han fijado periodos tope porque algunas entidades son partidarias de conceder más tiempo que otras.

Además, no se han precisado unos criterios de pérdida de ingresos y situación familiar para beneficiarse de la medida y, según fuentes del sector, en principio no se hará. Con ello, cada entidad podrá decidir libremente a quién concede la moratoria y por cuánto tiempo. También de qué manera, ya que el "aplazamiento se instrumentará, según los casos y en función del criterio de la entidad, mediante un préstamo personal, una modificación del préstamo hipotecario u otra fórmula financieramente equivalente". Algunas, así, prefieren otorgar un crédito puente con un tipo bajo que luego se consolide con la hipoteca, y otras se decantan por alargar el plazo de estas, entre otras opciones.

Voluntario pero instado

La AEB y la CECA, de hecho, han querido subrayar que sus asociadas han tomado la iniciativa "sin perjuicio de otras medidas de apoyo para el mismo fin que cada una puede ofrecer a sus clientes", dejándose así las manos libres. Asimismo, han destacado que las entidades la han adoptado "de manera voluntaria", si bien fuentes del sector reconocen que la medida ha sido animada y seguida de cerca por el Banco de España y el Gobierno.

Las patronales han aprovechado para defender que la moratoria "pone de manifiesto el firme compromiso de los bancos para apoyar y contribuir a que las familias que se han visto afectadas por la crisis superen esta difícil situación", ya que forma parte de una batería de "soluciones" conjuntas e individuales impulsada por el sector para ayudar a sus clientes y contribuir a la recuperación económica. La banca, efectivamente, se ha lanzado a anunciar medidas contra los efectos de la enfermedad en las últimas semanas para mejorar su maltrecha reputación y demostrar su responsabilidad y compromiso social, además de para evitar quedarse sin negocio por los problemas de sus clientes y repetir los errores de la crisis del 2008-2012.