efectos del coronavirus

Las empresas mantienen la presión para una moratoria fiscal

Varias autonomías, como Catalunya, han acordado una tregua tributaria con sus gravámenes

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Agustí Sala

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Foment del Treball y Pimec han abanderado una campaña de reclamación de una suspensión temporal de la presentación de declaraciones y autoliquidaciones de impuestos durante el periodo de estado de alarma en el  que muchas empresas o han tenido que cerrar o han visto reducidos sustancialmnente sus ingresos.

Foment, presidida por Josep Sánchez Llibre, llegó a remitir <strong>una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez</strong>, en la que le planteaba esta peitición de moratoria fiscal. Por ahora estas exigencias, que se materializarían en una tregua tributaria de tres meses especialmente en el IRPF, IVA Sociedades y las cotizaciones a la Seguridad Social, han caído en saco roto.

Ante este resultado, las divisiones del sector comercio de las dos grandes patronales catalanas alertaron esta semana de que <strong>un 70% de este tipo de negocios pueden verse abocados a cerrar</strong>, a tener que instar el preconcurso o el concurso de acreedores.

Estas organizaciones, que recuerdan al Ejecutivo que este tipo de medidas han sido consideradas prioritarias por la Comisión Europea, recuerdan que varias autonomías, como la catalana, han acordado moratorias de este tipo que afectan a los tributos propios y a los cedidos.

A este tipo de exigencias, que defienden la necesidad de que las compañias tengan liquidez, se suman diversas organizaciones profesionales, que van del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) a la Asociasción Española de Asesores Fiscales (Aedaf).