Operación empresarial

Bruselas avala sin condiciones la alianza entre Prosegur y Telefónica

Ambas compañías se repartirán al 50% el control de Prosegur Alarmas

Sede de Telefónica en Madrid.

Sede de Telefónica en Madrid. / EFE

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La Comisión Europea ha aprobado sin condiciones la alianza entre Telefónica y Prosegur para controlar al 50% el negocio de alarmas de Prosegur en España . La Comisión ha llegado a la conclusión de que la operación no plantea problemas de competencia en el Espacio Económico Europeo, según el comunicado emitido desde Bruselas.

En virtud de la adquisición propuesta, Telefónica adquirirá de Prosegur la mitad de las acciones de Prosegur Alarmas, lo que tiene como consecuencia el control conjunto de Telefónica y Prosegur sobre Prosegur Alarmas. La operación se anunció en septiembre del 2019 y se notificó a la Comisión el 15 de enero de 2020.

La investigación

La actividad principal de Telefónica consiste en la prestación de servicios de telecomunicaciones fijas y móviles, incluidas tarjetas SIM de comunicación entre máquinas (M2M). Esas tarjetas están presentes en diferentes dispositivos «conectados», entre ellos dispositivos de alarma. Prosegur Alarmas presta servicios de instalación de alarmas y conexión con centros de recepción de alarmas, tanto a clientes residenciales como a pequeñas y medianas empresas (pymes). Prosegur continuará prestando servicios de alarma y otros servicios de seguridad, pero sus clientes serán únicamente empresas.

Durante su investigación, la Comisión evaluó si Telefónica podría dejar de suministrar tarjetas SIM M2M o podría empeorar las condiciones de su suministro a los proveedores de servicios de alarma que compiten con Prosegur Alarmas.

También examinó si existiría un riesgo de debilitamiento de la competencia en caso de que Telefónica o Prosegur Alarmas tratasen de expandir sus respectivas posiciones a mercados vecinos mediante la agrupación de servicios de telecomunicaciones, de televisión y de alarma.

"La investigación de la Comisión constató la escasa probabilidad de que la operación falsee la competencia efectiva en los mercados de referencia, dado que las empresas no tendrían la capacidad de llevar a cabo ninguna de las prácticas mencionadas, y que, incluso si lo hicieran, no habría efectos apreciables sobre dichos mercados", se afirma en el comunicado emitido por la institución. "En consecuencia, la Comisión ha llegado a la conclusión de que la operación no plantea problemas de competencia en ninguno de los mercados objeto de la evaluación", se afirma.