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Caixabank gana 1.705 millones, el 14,1% menos por los costes del ERE

El resultado se elevó el año pasado a 2.390 millones sin el impacto del coste de la reestructuración laboral pactada con los sindicatos

Presentación de resultados de Caixabank

Presentación de resultados de Caixabank / periodico

Agustí Sala

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El Grupo CaixaBank obtuvo el año pasado un beneficio atribuido de 1.705 millones de euros, lo que supuso un 14,1% menos que un año antes, como consecuencia de los costes por el expediente de regulación (<strong>ERE</strong>) de <strong>2.023 empleos</strong> pactado con los sindicatos en el segundo trimestre del 2019.

Sin el efecto de los 978 millones brutos del ERE, el resultado fue de 2.390 millones, un 20,4% mayor respecto al ejercicio anterior y el rendimiento sobre los activos tangibles (ROTE), que fue del 7,7%, se eleva hasta el 10,8% sin contar con los costes de la reestructuración, según las estimaciones de la entidad presidida por Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar. Las acciones de CaixaBank lideraron las subidas en bolsa por la mañana, con un alza superior al 3%, que luego se ha ido moderando hasta terminar casi en tablas. 

Gual, en la presentación de las cuentas del 2019 en València, ha destavo los resultados obtenidos en una etapa en la que el sector bancario tropieza con "un fuerte viento de cara", como los tipos de interés planos y un entorno internacional incierto. Pese a ello, CaixaBank ha seguido reforzando su "liderazgo en banca comercial en España", con un crecimiento sostenido de cuotas de mercado. Destaca, por ejemplo, que ha alcanzdo el 27,1% de todas las nóminas domiciliadas en España.

Gortázar, por su parte, ha resaltado la combinación de tres factores: el "fuerte crecimiento del volumen de negocio",  con el 4,7%, en un año de "profunda transformación del grupo" tanto a nivel de red como de relación digital y "la mejora de la fortaleza y calidad del balance".

El negocio bancario y de seguros, con 1.060 millones, fue el que mayor aportación realizó al resultado; seguido de la filial portuguesa BPI, con 332 millones y las distintas participaciones del grupo, con 313 millones. En total, los ingresos procedentes del negocio principal,  8.316 millones, experimentaron un alza del 1,2%.

El margen de intereses ascendió a 4.951 millones de euros, con un aumento del 0,9% debido principalmente a los mayores ingresos de crédito por el incremento de volumen de negocio, al ahorro en la financiación minorista e institucional y a la mayor aportación del negocio asegurador.

Comisiones

Por su parte, los ingresos por comisiones se situaron el año pasado en 2.598 millones, con un alza del 0,6% respecto al 2018, con un buen comportamiento respecto al tercer trimestre (+5,7%) y al mismo trimestre del ejercicio anterior (+7,5%).

El volumen de negocio, que incluye la suma de créditos y recursos totales gestionados, alcanzó los 611.692 millones, con un aumento del 4,7%. Los recursos de clientes ascendieron  a 384.286 millones de euros, un 6,9% más. La ratio de morosidad disminuyó hasta el 3,6% (-108 puntos básicos menos que el ejercicio anterior), la cota "más baja que ha alcanzado la entidad hasta ahora", según el grupo.

Gual ha destacado que la ratio CET 1, una de las más importantes, aumenta en medio punto hasta el 12%, "claramente por encima de los requisitos de capital que establece el Banco Central Europeo (BCE)", situado en el 8,8%.

Dividendo

A su vez, la entidad "avanza más rápido de lo previsto" en su transformación destinada a centrarse en el cliente y la apertura de oficinas 'store', de las que en junio de este año tiene previsto tener más de 600. 

El consejo de administración de la entidad ha aprobado el reparto de un dividendo de 15 céntimos por acción con cargo a los resultaods del 2019, lo que supone rentabilidad por 5,4%. De esta forma se mantiene una política de 'pay- out' por encima del 50%, en concreto, el 52,6%.