HISTORIAS MÍNIMAS

Auditando el asfalto

Sotavia escanea las calles en un vehículo con cámaras que detectan anomalías en el pavimento. Los ayuntamientos son el principal cliente de esta revisión a demanda

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CARME ESCALES

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Grietas, socavones, fisuras, levantamiento o combaduras del pavimento, cualquier pequeño o gran desperfecto sobre el asfalto Sotavia lo localiza y registra. Es la start-up de tres doctorados en ingeniería electrónica y comunicación: Simó Graells, Joan Ramon Ragué y Carles Vilella, que ofrecían servicios a empresas, por ejemplo, en el campo de las antenas. Y se presentaron al concurso internacional Barcelona Open Challenge con el que el Ayuntamiento de Barcelona abría la posibilidad a profesionales de idear soluciones a problemas para los que el consistorio no había hallado ninguna eficaz.

Detectar desperfectos en la calle fue su reto a solventar. El sistema que idearon ganó el concurso y la administración se hizo cargo de los costes de su desarrollo e implementación para detectar las anomalías sobre el asfalto en los barrios de la ciudad. «Con un vehículo dedicamos tres meses a escanear todas las calles», explica Simó Graells.

               El contrato municipal se prolongó 3,5 años y desde hace un año, la empresa de Graells y sus socios, con oficina en el Parc Tecnològic de Barcelona Activa, en Nou Barris, ya trabaja para otros ayuntamientos y empresas de mantenimiento. Santa Coloma de Gramenet fue el primer consistorio que encargó sus servicios después de Barcelona. Le siguieron Sant Boi de Llobregat, Rubí, Sant Cugat del Vallès, Esplugues de Llobregat y Cardedeu. Y esta semana, el vehículo de Sotavia escaneará las calles de Sant Esteve Sesrovires.

Escaneado nocturno

El coche va equipado con dos cámaras que graban durante el recorrido –como los coches de Google Maps-. Va detectando y señala cualquier imperfección sobre el asfalto. Las grabaciones se hacen de noche y a velocidad normal de circulación en las vías urbanas. Las imágenes de la superficie del pavimento captadas tridimensionalmente se clasifican y se filtran según tipología y se presentan al cliente localizadas digitalmente sobre el mapa.

Las grabaciones, en tres dimensiones, se hacen de noche y a velocidad normal de circulación en las vías urbanas

Los tres socios fundadores de Sotavia (contracción de su idea original como nombre Sot a la via) se ocupan de la dirección, operaciones financieras e I+D de la empresa, que aparte, cuenta con un comercial, el chófer del vehículo y otro profesional que valida los datos obtenidos. 145.000 euros fueron la aportación inicial fruto del concurso municipal que ganaron. Los socios invirtieron otros 70.000 euros, más una subvención de 60.000 euros del Programa Estatal de Promoción del Talento y su Empleabilidad en I+D+i, Emplea, del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades; y un crédito Enisa (Ministerio de Industria), de 50.000 euros. El pasado año Sotavia facturó cerca de 90.000 euros y esperan aproximarse a los 200.000 al cierre de este.

En la cita anual Smart City, para el desarrollo urbano que organiza Fira de Barcelona, celebrada hace una semana, iniciaron contactos para ofrecer sus servicios a otros países.

Los tres emprendedores

<span style="font-size: 1.6rem;"><strong>Simó Graells</strong> y <strong>Joan Ramon Ragué</strong>, ju</span><span style="font-size: 1.6rem;">nto al tercer socio de Sotavia, Carles Vilella, compartieron aula estudiando ingeniería y fueron profesores en la <strong>Universidad de La Salle-Ramon Llull</strong>. Quisieran preparar más vehículos para abrir filiales en diferentes regiones de España y Europa.</span>