Javier Martínez (jubilado): "La pensión es un derecho, no un gasto"

Javier Martínez forma parte del Colectivo de Pensionistas de Barakaldo. Con 63 años es uno de esos jubilados de sobradas energías y contagioso entusiasmo que forma parte de la columna norte que se dirige a Madrid en defensa de pensiones dignas para todos. Narra con entusiasmo su periplo, espléndido a la hora difundir el mensaje a quien le quiera escuchar y la confianza íntima de que la experiencia vivida estos días vale la pena.

Eran 30 los pensionistas que salieron de la plaza de Arriaga de Bilbao el pasado 23 de septiembre pero ya son 40 y confían en llegar a la cincuentena a las puertas de Madrid, el martes de la semana que viene, 15 de octubre.

El grupo que ha superado ya Somosierra no solo lo integran hombres y mujeres de Vizcaya. Hay pensionistas de Burgos, de Soria, Asturias, Cantabria, Aragón, Catalunya y Castilla La Mancha. "El asunto de las pensiones es transversal, en los pueblos por los que pasamos se olvidan de las siglas y apoyan nuestras reclamaciones", explica Martínez. Entre las reivindicaciones que plantean figuran la de blindar las pensiones como derecho fundamental y que éstas se revaloricen por ley con el IPC real; así como que la pensión mínima sea igual al salario mínimo interprofesional (900 euros).  

"La gente de los pueblos y de los ayuntamientos nos están alojando en sus casas y en polideportivos, incluso marchan con nosotros alcaldes del PP o del PSOE, eso es igual". Recuerda este vasco que el problema ya no es solo si las pensiones suben o no el IPC, es que se está preparando una tormenta perfecta para recortar las pensiones en España, con mensajes que inducen a la congoja colectiva.

"Desde hace algunos años se están haciendo políticas públicas que sirven a los intereses de las grandes empresas más que a los de la gente", reclama este líder de los jubilados.  "La cuestión es que se está lanzando el mensaje de incertidumbre sobre las pensiones, una visión pesimista sobre la viabilidad de las pensiones que es falsa. La Constitución, ahora que todos se ponen tan constitucionalistas, garantiza que existan pensiones dignas para todos y que se revaloricen", explica. "La pensión es un derecho, no un gasto, y está garantizada por la Constitución", concluye. 

En sus argumentos, esos que se cimentan y construyen ahora durante paseos de 20 kilómetros diarios, gana peso la crítica al entorno. "Se está pervirtiendo incluso el lenguaje. Se habla de inversiones en investigación, de presupuesto de defensa y siempre, de gasto en pensiones. El objetivo siempre es crear la sensación de que las pensiones son una carga para el Estado y sin embargo ese trato no lo recibe ni la Iglesia ni la Casa del Rey", critica Martínez.