La Generalitat no consigue que Ryanair renuncie a cerrar Girona

La delegación del Departament de Territori i Sostenibilitat enviada a Dublín este lunes no ha conseguido que Ryanair reconsidere públicamente su decisión de cerrar su base en Girona. Así lo han reconocido desde Territori en un comunicado de prensa, en el que, no obstante, se resisten a dar por definitivo el cierre. La Generalitat intentará buscar en los próximos días la complicidad del gestor aeroportuario, Aena, para aumentar la presión sobre Ryanair.

El secretario de Infraestructuras y Mobilidad, Isidre Gavín, y el director de Aeropuertos de Catalunya, Jordi Candela, han encabezado la comitiva que se ha desplazado hasta Irlanda para negociar con el consejero delegado de la compañía, Eddie Wilson. Ryanair ha declinado hablar en concreto de Girona y se ha remitido a informar a la Generalitat de que el cierre de bases responde a un plan estratégico a nivel europeo. Actualmente hasta un total de 164 trabajadores pueden perder su empleo si se oficializa la clausura.

Fuentes del Departament de Territori se resisten a dar por definitivo el cierre de Girona y trasladan que "exigirán" a Aena que se sume a las negociaciones para tratar de revertir la situación. Ryanair todavía no ha registrado formalmente ningún expediente de regulación de empleo (ERE) para iniciar oficialmente el proceso de despido colectivo necesario para el cierre de las bases. En comunicados anteriores enviados a los trabajadores de los centros señalados (a priori tres bases de las Islas Canarias y otra de Girona), la aerolínea fijó el 8 de septiembre como fecha de constitución de la comisión negociadora con los representantes legales. 

60 millones en subvenciones

"No podrán hacer lo que les de la gana", ha declarado el 'conseller' de Territori, Damià Calvet, en una entrevista en TV3, horas antes de la reunión. Cabe recordar que Ryanair percibe anualmente un monto económico en ayudas a la promoción turística de Girona, que se renueva anualmente y se mide en función de los pasajeros que viajan con la aerolínea desde o hacia dicho aeropuerto. Desde la firma del primer convenio en el 2003 la aerolínea 'low cost' se ha embolsado un total de 60 millones de euros, según datos de Territori, y el actual acuerdo todavía tiene un año de vigencia.

Esos 60 millones, según también cálculos de Territori, han atraido hasta ahora un gasto turístico de 500 millones. Fuentes del Departament han explicado que la aerolínea seguiría recibiendo, mientras dure el convenio, dinero público aunque oficialice el cierre de bases. Ello es debido a que el pacto no está vinculado a si tiene base o no, sino en función de los pasajeros que atrae.