'cloacas policiales'

González sostiene que la actuación del BBVA fue "intachable"

Francisco González

Francisco González / ANDER GILLENEA

P. Allendesalazar

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Francisco Gonzálezpresidente del BBVA durante los años en que el banco contrató al excomisario Villarejo, ha defendido este martes que la actuación de su entidad ha sido "intachable y con un cumplimiento por encima de lo exigible en materia de gobierno corporativo y cumplimiento normativo". Por ello, el exejecutivo ha considerado "muy importante afrontar la investigación abierta con total transparencia y ayudar a deslindar posibles actuaciones individuales de carácter irregular, si las hubiera, de la actuación del banco en su conjunto", tras la imputación a la entidad de tres delitos de cohecho, corrupción en los negocios, y descubrimiento y revelación de secretos. 

El máximo responsable del segundo banco español entre el 2000 y el 2018 ha sostenido en una nota distribuida a los medios que bajo su mandato el BBVA trabajó "bajo unos estrictos estándares de conducta" y actuó "dentro de la más estricta legalidad para defender los intereses" del banco, es decir, de "sus profesionales, sus accionistas, sus clientes y los intereses generales de la sociedad". Como en otras ocasiones, ha asegurado que se enteró de la contratación de Villarejo por la prensa en mayo del 2018 y que encargó una investigación interna para identificar "cualquier actuación irregular", que su sucesor, Carlos Torres Vila, amplió en enero del 2019 con un análisis externo ('forensic') encargados a firmas independientes especializadas.

El banco, según González, ha colaborado con la investigación judicial desde el primer momento y ha aportado toda la documentación en su poder, incluidos los resultados del "profundo y exhaustivo" estudio 'forensic'.  "Desde que se abrió la pieza, BBVA he estado máximamente interesado en colaborar con la justicia, con la mayor transparencia y objetividad, al objeto de identificar y esclarecer lo más rápidamente las posibles irregularidades que se hayan podido producir. Tengo la mayor confianza en el Grupo BBVA, en sus órganos de gobierno y sus profesionales, y por supuesto, todos confiamos plenamente en que los órganos judiciales esclarecerán cualquier actuación contraria a la legalidad", ha concluido.

Ausencia de control

El juez Manuel García Castellón sospecha que "la cúpula" del BBVA pudo consentir la contratación de Villarejo en época de González para tareas de información y espionaje en vista del "beneficio personal y empresarial" que le podían reportar. El magistrado de la Audiencia Nacional quiere determina si el banco puso en marcha medidas para evitar el delito o si "la ausencia de mecanismos de control" y "la tolerancia con prácticas contrarias a la buena fe empresarial" fueron "medios de los que el banco pudo haberse valido para facilitar la contratación" del expolicía, todo ello "consentido por la cúpula del propio banco".

Así aparece recogido en un fragmento del auto de imputación a la entidad al que ha tenido acceso la agencia 'EFE'. El juez investigará si el banco contribuyó a mantener las relaciones con Villarejo en beneficio propio o si la presunta corrupción de alguno de sus directivos, al que el expolicía hizo regalos, "pudiera considerarse como perjudicial" para la entidad. El magistrado ha rechazado por el momento la petición del banco de personarse en la causa como perjudicado ya que quiere aclarar si se benefició de contratar a Villarejo y si no aplicó los controles necesarios, "permitiendo" así "la corrupción personal de sus directivos" y "prácticas que pudieran resultar contrarias al interés" del BBVA.

El banco ha anunciado este martes la salida de Eduardo Arbizu, directivo de confianza de González y responsable de asuntos jurídicos desde el 2002. El ejecutivo también fue responsable de auditoría interna y cumplimiento normativo entre el 2007 y el 2011, años en los que Villarejo estuvo contratado, y el año pasado fue uno de los directivos a los que se encomendó la investigación interna encargada por el expresidente. Le sustituye como responsable de regulación y control interno Ana Fernández, actual directora de riesgos no financieros y que durante sus 25 años en la entidad ha estado ligada a áreas vinculadas con el negocio. 

Una decena de imputados

Aparte de al banco, el juez ha imputado a una decena de directivos y exdirectivos de la entidad, entre ellos Ángel Cano, ex consejero delegado; Julio Corrochano, exjefe de seguridad del BBVA y ex comisario general de la Policía Judicial; y Antonio Béjar, exdirector de Riesgos y Recuperaciones Inmobiliarias, que está colaborando con el juez.