remuneraciones

González ganó 5,4 millones en su último año de presidente del BBVA

Francisco González (izquierda), junto a Carlos Torres, ayer.

Francisco González (izquierda), junto a Carlos Torres, ayer.

P. Allendesalazar

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Francisco González, presidente del BBVA durante casi veinte años y hasta el pasado diciembre, ganó 5,474 millones de euros en su último ejercicio al frente de la entidad (4,058 millones en metálico y 1,416 millones en acciones), apenas un 5,4% menos que en el 2017 pese a la caída generalizada de las entidades financieras en bolsa durante el 2018. El componente fijo del sueldo ya se lo ha embolsado, mientras que el variable (2,641 millones) la recibirá parte en el primer trimestre del 2019 (40%) y parte a lo largo de los próximos cinco años (60%). Todo ello se suma a los 79 millones que el banco había reservado para su jubilación.

La figura de González se ha visto envuelta en la polémica por las escuchas ilegales que presuntamente ordenó el banco al excomisario Villarejo. Según vienen publicando distintos medios desde mayo, el BBVA pagó más de cinco millones de euros a la empresa de Villarejo entre el 2004 y el 2017 por distintos servicios, entre ellos los supuestos pinchazos (unos 4.000 teléfonos y unas 15.000 llamadas de políticos, empresarios y periodistas) para tratar de frenar el intento de la constructora Sacyr de controlar la entidad en época del Gobierno de Zapatero.

Daño desconocido

En su informe de gestión del 2018, el BBVA acaba de reconocer que "podría estar inmerso en investigaciones por las autoridades judiciales sin que, hasta el momento, se haya recibido ninguna notificación formal al efecto, en relación con la contratación de actividades presuntamente irregulares que podrían tener un impacto negativo reputacional o económico para el banco". También ha recordado que ha encargado una investigación externa a la consultora PwC y los despachos de abogados Garrigues y Uría, "no siendo posible predecir en este momento el ámbito o duración de su investigación o cualquiera realizada por las autoridades judiciales ni sus posibles resultados o implicaciones para el grupo".

Las supuestas conversaciones pinchadas publicadas por 'Moncloa.com' y 'El Confidencial' sostienen que el expresidente del banco estaba al tanto de las operaciones de Villarejo. Carlos Torres, aupado por su antecesor a la presidencia de la entidad, sostuvo hace unos días que González afirma no haber tenido conocimiento de las presuntas irregularidades y aseguró creerle, pero al tiempo prometió "levantar todas las piedras" para aclarar lo sucedido. Como recordó y es habitual en la banca, el sueldo diferido de González está sometido a cláusulas de reducción y recuperación de las cantidades ('malus' y 'clawback'), que se aplicarían si se demuestra su implicación.

Nuevos sueldos

El informe de remuneraciones que el BBVA ha publicado este miércoles también informa de que Torres ganó el año pasado 4,213 millones (3,21 millones en metálico y 1,003 millones en acciones), el 13,9% menos. La parte variable (2,393 millones) también la percibirá en diferido, con el mismo reparto que González. El nuevo presidente cobrará 2,453 millones de salario fijo en el 2019 y el banco estima que la parte variable será el 55% de su sueldo si cumple los objetivos, con lo que en total se podría embolsar unos 5,45 millones. A estas cantidades hay que añadir los 1,896 millones que la entidad reserva cada año para cuando se jubile, en una bolsa que ya acumula 18,581 millones.

Por su parte, el nuevo consejero delegado, el turco Onur Genç, tendrá un sueldo fijo este año de 2,179 millones, con lo que su remuneración total podría rondar los 5,32 millones. El año pasado, como máximo responsable de la filial del grupo en Estados Unidos, percibió 3,22 millones. El ejecutivo ha pactado, además, recibir 600.000 euros al año por tener que trasladarse a España (en su anterior cargo recibía 376.000 euros por el mismo concepto) y otros 653.700 euros (el 30% del sueldo fijo) en lugar de que el banco le haga aportaciones para su jubilación.

El otro consejero ejecutivo de la entidad, el exdirectivo del Banco de España y del Banco Central Europeo (BCE) José Manuel González-Páramo, ganó 1,284 millones el año pasado, el 4,8% menos, y tiene acumulados 1,067 millones para su jubilación. Los consejeros no ejecutivos recibieron 4,693 millones, mientras que los 15 altos directivos del banco que no forman parte del consejo se embolsaron 25,305 millones. La entidad tiene guardados 253 millones para pagar la jubilación de exdirectivos.