Vodafone España reduce sus ingresos un 7% pero frena la caída comercial en diciembre

Vodafone España no atraviesa su mejor momento. En plena negociación de un ERE que afectará a cerca de 1.200 trabajadores, la filial española de la compañía inglesa ha visto reducir sus ingresos totales un 7%, hasta los 1.165 millones de euros en el tercer trimestre de su año fiscal. Una cifra cercana a los ingresos por servicio –los que realmente miden su actividad comercial- que alcanzaron los 1.055 millones de euros, un 7,4% menos que en el mismo periodo del año anterior y se situaron en línea con la caída del 7,2% del segundo trimestre.

No obstante, la operadora empieza a ver la luz con el freno de la caída comercial que provocó la 'guerra del fútbol' al obtener mejores números en el mes de diciembre con un saldo positivo de 8.000 clientes de contrato de telefonía móvil y 6.500 de portabilidad fija. Sin embargo, en el conjunto del trimestre, el número de clientes de contrato de telefonía móvil descendió en 94.000 hasta cerrar el mes de diciembre con 11,5 millones y la cartera de clientes de banda ancha fija se redujo en 6.000 en estos tres meses hasta quedar en 3,2 millones.

Por otra parte, el número de clientes de Vodafone TV aumentó en 13.000 en el tercer trimestre de su año fiscal, hasta cerrar 2018 con un total de 1,28 millones de usuarios en cartera. En fibra, la filial española de la compañía británica logra 49.000 altas netas en los tres últimos meses del año 2018 con lo que la cartera de la compañía en fibra consigue, por primera vez, superar los 2,8 millones.

"El cambio de contratos móviles en nuestros mercados y la mejora de las tendencias de los clientes en Italia y España son alentadores. No obstante, todavía no se han traducido en nuestros resultados financieros, con una tendencia de ingresos similar en Europa al segundo trimestre", señaló el CEO del Grupo Vodafone, Nick Lead, quien prevé comenzar a mejorar estas cifras a partir del cuarto trimestre del año, gracias al influjo de su nueva apuesta comercial que ya no se verá afectada por el fútbol. 

Revolución en la organización de la compañía

Además, según ha informado la filial española este viernes, Vodafone España tiene previsto llevar a cabo un cambio en su organización para "eliminar duplicidades, ganar agilidad y reforzar la coordinación entre equipo" dentro de la nueva senda de reducción de costes para poder competir en un mercado protagonizado por las ofertas 'low cost' iniciada con la salida del fútbol y seguida con su decisión de proponer un ERE a sus trabajadores.

La propuesta, transmitida en la mesa de negociación del ERE de este jueves, incluye una reducción de las divisiones territoriales de las seis actuales a cuatro de forma que las comunidades de Aragón, Catalunya, Comunidad Valenciana, Baleares y Murcia se situarían en la región Este; Murcia en la región Sur y País Vasco, Navarra, La Rioja, Cantabria, Asturias, Galicia y Castilla y León en la región Norte.

Además, Vodafone España integrará las funciones de operaciones de cliente (COPs) en otras áreas de la organización para "ganar eficiencia y mejorar la coordinación". Así, las interacciones con clientes se incorporarían a las unidades de negocio, y las operaciones de provisión, instalación, soporte técnico y mantenimiento en el Área de Tecnología. Además, la empresa quiere realizar una racionalización de las plataformas y de los proveedores relacionados con gestión del cliente, instalaciones y servicio técnico.