Foro Económico Mundial

China se muestra optimista sobre el fin de la guerra comercial con EEUU

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Rosa María Sánchez

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La guerra comercial entre EEUU y China es la gran preocupación sobre la economía mundial que centra los debates el Foro Económico Mundial (WEF por su sigla en inglés) pero ninguno de sus dos protagonistas ha acudido este año a la reunión anual de líderes políticos, económicos y sociales en la localidad suiza de Davos. Ni el presidente de EEUU, Donald Trump, ni su homólogo chino, Xi Jinping, han acudido a la localidad alpina, pero sí han participado miembros de sus respectivos gobiernos que se han encargado de llevar algo de tranquilidad al desasosiego a los participantes en el Foro Mundial

“Soy optimista” dijo este miércoles el vicepresidente de China, Wang Qishan, en relación a una pronta reconstrucción de las relaciones comerciales entre las dos mayores potencias económicas del mundo. Qishan interpretó la misma confianza de las palabras de Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, que el día anterior intervino ante los asistentes de Davos mediante una conferencia retransmitida por video desde Washington.

“Hay quien dice que un conflicto de superpotencias entre nuestros países es inevitable. Yo no lo veo así”, había dicho Pompeo el martes. “Las economías de China y de EEUU son mutuamente indispensables. Esto es una realidad. Conclusión: ha de haber un beneficio mutuo, todos deben salir ganando, la confrontación daña los intereses de ambas partes”, abundó el vicepresidente chino este miércoles ante el auditorio del WEF.

El mandatario chino aprovechó su esperada intervención en el plenario del Foro Económico para despejar las dudas más recientes sobre la capacidad de crecimiento de la economía de su país. “Hay muchas incertidumbres en el 2019, pero la economía de China continuará logrando un crecimiento sosenible” , apuntó Qishan.  “La velocidad no es lo importante. Lo realmente importante es la calidad y la eficiencia de nuestro crecimiento económico” para seguir reduciendo los niveles de pobreza de la sociedad china.

Moscovici sorprende

Tampoco ha aterrizado en Davos la protagonista del otro calambrazo de incertidumbre que sacude la economía mundial. La primera ministra británica, Theresa May, no ha aparecido en la localidad suiza, pero eso no ha evitado continuas reflexiones sobre el ‘Brexit’ en la estación de esquí. “Todavía existe una posibilidad de que el Reino Unido de marcha atrás en el ‘Brexit’”, dijo el comisario europeo de Economía, Pierre Moscovici, haciendo levantar las cejas a los asistentes en la mesa redonda sobre Europa en la que participaba.

Con todo, según Moscovici,  “la pelota está en el Parlamento del Reino Unido”, en alusión al debate del próximo día 29. Si la renegociación del acuerdo sobre el ‘Brexit’ está excluida “nuevas pistas pueden emerger, tal vez pistas espectaculares”, añadió el francés, de forma enigmática.

Hay que abordar el problema "con claridad" y, si es preciso darles más tiempo, "pues adelante", declaró, punto en el que coincidió con el ministro alemán de Economía y Energía, Peter Altmaier.

Defensa del multilateralismo

En su calidad de presidente de turno del G-20 (el grupo de los 20 países desarrollados y emergentes con mayor peso en la economía mundial), el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, anunció en Davos su propósito de centrar los debates de la próxima cumbre de este grupo en reforzar los consensos a favor del sistema de comercio mundial y contra el cambio climático. “Hago un llamamiento a cada uno de vosotros para reconstruir la confianza hacia el sistema internacional de comercio”, dijo Abe dirigiéndose a los líderes políticos y económicos.

La apelación fue del agrado de la cancillera alemana Ángela Merkel, que durante su intervención hizo una defensa metódica del multilateralismo, y lo contrapuso a las políticas populistas que lo rechazan, como la representada por el nuevo presidente brasileño, Jair Bolsonaro, que intervino el día anterior en Davos, o la del propio Donald Trump. “Hay una corriente en el mundo que defiende que lo mejor es pensar en uno mismo, en sus propios intereses, y que a partir de ahí surgirá un orden. Yo lo pongo en duda”, manifestó Merkel.