Conflicto laboral
Los auxiliares de veterinarios de los mataderos catalanes exigen cobrar a final de mes
Un litigio entre la Generalitat y la empresa prestadora del servicio se traduce en inestabilidad laboral entre los trabajadores
Los aledaños del estadio del Camp Nou se han llenado de bocinazos y cánticos a dos días del ‘Clásico’ entre el Barça y el Madrid. No obstante, los responsables no han sido aficionados de uno de los dos equipos, sino alrededor de 50 auxiliares de veterinaria de los mataderos de Catalunya concentrados a las puertas del Departament de Salut. El motivo de la concentración, convocada por los sindicatos UGT y CCOO, ha sido reivindicar mejores condiciones laborales para este colectivo, que este octubre no cobrará, entre otros, sus nóminas a tiempo.
Los manifestantes presentes la mañana del viernes forman parte de una plantilla de 172 personas, contratadas por la Fundació Privada d’Indústries de la Carn (FIC), una entidad vinculada a la patronal del sector y encargada de realizar tareas de apoyo a los veterinarios de la Generalitat en los controles sanitarios de los mataderos. Sus auxiliares, contratados a través de esta entidad, que a su vez le cobra por ello unas tasas a la Generalitat, están bajo las órdenes de los veterinarios, que son los que acaban certificando el correcto estados de los animales que van a ser sacrificados en Catalunya para el consumo humano.
Actualmente entre el Departament de Salut y FIC se levanta un conflicto legal que provoca, entre otros, que los trabajadores tengan que esperar a final de mes para saber si cobrarán a tiempo su sueldo. Si bien el servicio lo llevan realizando desde el 2001, tal como confirma la FIC, no es hasta el 10 de noviembre del 2016, tal como publicó el Tribunal Català de Contractes del Sector Públic, cuando se saca por primera vez a concurso la prestación de dicho servicio. Concurso que la FIC perdió ante la empresa británica Eville & Jones, recurrió y actualmente se encuentra en los tribunales. De mientras, los servicios los sigue prestando la FIC, con la inestabilidad consecuente que preocupa a los trabajadores.
"Realizamos inspecciones a ritmos propios de producción. Podemos verificar alrededor de 700 animales la hora", explican desde el comité de empresa. Una de las reivindicaciones del colectivo es el aumento de plantillas, prácticamente congeladas durante la última década, según denuncian. No así la producción, que los sindicatos afirman que aumenta año a año. "Si lo que genera un problema es el intermediario, que sea la Generalitat la que asuma directamente la gestión", añaden los representantes de los trabajadores.
Los trabajadores tienen previsto seguir presionando en esa línea, por lo que la continuación de la concentración de este viernes serán dos días de huelga, los próximos 5 y 6 de noviembre. "No cobramos, no trabajamos", ha sido uno de los cánticos que han resonado la mañana del viernes por los aledaños del Camp Nou.
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