ENCUESTA DE POBLACIÓN ACTIVA

La desaceleración llega a las cifras del paro y el verano cierra con su menor descenso desde el 2013

Un camarero trabajando en la Rambla de Catalunya.

Un camarero trabajando en la Rambla de Catalunya.

Gabriel Ubieto

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La desaceleración de la economía española ya se refleja en las cifras del paro, es decir, estas bajan, pero cada vez a un ritmo menor. El número de desempleados disminuyó en el tercer trimestre del año en 164.100 personas, su menor descenso en un cierre de verano desde el 2013, dejando el número total de desempleados en 3.326.000 personas, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

A pesar de hacerlo a un menor ritmo, la tasa del paro acumuló su sexto final de verano con descensos y en los 12 últimos meses el desempleo disminuyó en 405.800 personas. Este degoteo persistente deja una tasa de paro que por primera vez desde el 2008 baja del 15%, concretamente se situó en el tercer trimestre de este año en el 14,5%, lo que supone siete centésimas menos que en el trimestre anterior. Esa cifra llega, no obstante, con 303.100 personas activas menos en el mercado laboral español. Es decir, la tasa de paro está bajando, pero a costa de expulsar o hacer desistir a miles de personas.  

"La progresiva disminución del desempleo es una buena noticia, aunque nos estamos acercando a tasas que ya va a costar mucho bajar. En algunos sectores ya se detecta cierto paro técnico", afirma el catedrático de la Universitat Pompeu Fabra, Oriol Amat. El paro técnico hace referencia a tasas prácticamente inexistentes de desempleo, que reflejan la transición entre puestos de determinados profesionales. Algo que en la economía española convive con altas tasas de paro.

El profesor especialista en economía del Trabajo de la Univesristat de Barcelona, Joan Antoni Alujas, conincide con ese diagnóstico. "El mercado de trabajo está notando la desaceleración del conjunto de la economía, algo que no solo pasa en España. Con las actuales previsiones de crecimiento para los próximos años difícilmente podremos bajar hasta tasas menores al 10%", analiza Alujas. "Ahora es el momento de centrar las políticas públicas en reducir el desempleo entre colectivos concretos, como los jóvenes o los mayores de 50 años, entre los que la cifra es muy superior al 15%", añade.

A nivel de creación de ocupación, esta aumentó en el tercer trimestre, aunque también denota los efectos de la desaceleración. El final del verano dejó un balance de 183.900 ocupados más que en el trimestre anterior, una cifra, no obstante, menor en años anteriores y que no era tan moderado en un tercer trimestre desde el 2015.

Una de las notas positivas que destaca el catedrático de la UPF sobre los datos de la EPA es el aumento de ocupados registrados tanto entre los más jóvenes, como entre los de más edad. Dos de los colectivos más castigados tras la crisis. Según los datos de este tercer trimestre, el número de ocupados entre 16 y 19 años aumentó el 26,5% y entre aquellos entre los 20 y los 24 años el 6,4%. Por otro lado, los trabajadores mayores de 55 años aumentaron el 2%. Los peores registros los protagonizaron los trabajadores de mediana edad, es decir, entre los 30 y los 40 años, con un descenso del 1,3%.

Mayoritariamente el aumento del empleo se materializó a través de un mayor número de trabajadores asalariados, siendo, a su vez, la mayoría de estos temporales. Concretamente el 85,6% de los nuevos asalariados del tercer trimestre firmaron un contrato de duración finita, dejando una tasa de temporalidad global del 27,4%, 0,6 puntos mayor que el trimestre pasado. No obstante, la superviviencia en el mercado laboral de estos trabajadores es sensiblemente inferior a la de los indefinidos, ya que en los 12 últimos meses el número de indefinidos aumentó en 374.000 personas y los temporales en 152.900 personas. 

Por sectores

Los servicios prácticamente monopolizaron la creación de ocupación en el tercer trimestre, siendo nueve de cada diez nuevos ocupados de este sector. La hostelería fue uno de los motores, con 91.100 nuevos ocupados, el 5,2% más que el trimestre anterior. La construcción y el comercio al por menor también subieron, aunque en menor medida, ambos el 2,5%. En el lado opuesto, la educación fue, de entre los más pesados númericamente, el que más bajó, con 95.200 ocupados menos.

"Es preocupante que los sectores que están creciendo en ocupación son los menos cualificados. Las características del actual crecimiento del empleo guardan muchas similitudes con las que había antes de la crisis económica. Los elevados niveles de temporalidad y precariedad laboral no disminuyen, lo que asienta los cimientos de la próxima crisis", opina el investigador del centro de estudios demográficos de la Universitat Autònoma de Barcelona, Pau Miret.  

Por comunidades autónomas

Catalunya ha sido la comunidad que ha liderado la disminución del paro en el tercer trimestre del año, con 28.300 desempleados menos que el trimestre anterior, con un total de 403.700 parados. Ello supone una disminución del 6,5% y deja una tasa de paro en el 10,6%. En materia de creación de ocupación fue la segunda autonomía con mayor creación, después de Baleares, con 33.500 nuevos trabajadores más.