colapso administrativo

El juzgado para cláusulas abusivas de Barcelona deja de señalar juicios

Reclama medidas de refuerzo en tanto que la lista de espera de los procesos supera ya el año

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Max Jiménez Botías

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El Juzgado de Primera Instancia número 50 de Barcelona, que centraliza las reclamaciones por cláusulas abusivas de la hipoteca en la provincia de Barcelona, ha dejado de señalar fecha para la celebración de nuevos juicios «a la espera -según consta en una diligencia de ordenación dirigida a diferentes despachos de abogados- que se afronten medidas de refuerzo para este juzgado».

La medida viene determinada por un acuerdo gubernativo del magistrado titular de juzgado en que se instruía al personal para no señalar nuevos juicios cuando la lista de espera superara el año de duración.

Según despachos de abogados, como el Col·lectiu Ronda, que llevan un importante número de demandas por hipotecas con cláusulas suelo, esta actuación del juzgado que debe resolver las demandas interpuestas por cláusulas abusivas en préstamos hipotecarios "como una verdadera denuncia de la situación de colapso técnicos y humanos que actualmente afecta el funcionamiento de estos juzgados especializados", apuntan. Y agregan que esta situación impide a las personas que trabajan en esas dependencias lo hagan con condiciones dignas y en favor del derecho a la tutela judicial de los consumidores bancarios.

Incertidumbre sobre el juicio

Las personas afectadas por la presencia de cláusulas abusivas en las escrituras de sus préstamos hipotecarios de la provincia de Barcelona que vean aceptadas a trámite sus demandas no podrán saber en estos momentos cuando se celebrará su juicio, aunque pueden tener la certeza de que en ningún caso será antes de transcurrido al menos un año.

El juzgado 50 de Barcelona, uno de los 54 en todo el Estado especializados en resolver litigios relacionados con abusos bancarios en el ámbito hipotecario, ha dejado de señalar nuevas fechas de juicio siguiendo las instrucciones del magistrado titular, que indicó que no se asignarían nuevas en tanto no hubiera la posibilidad de hacerlo en el plazo de un año y mientras no «se afronten medidas de refuerzo para este juzgado», según se puede leer en el acuerdo gubernativo trasladado por el juez a los funcionarios asignados.

Transcurrido poco más de un año desde su creación, la estructura de juzgados especializados se ha demostrado, a pesar de la cifra de sentencias dictadas, insuficiente para dar respuesta a la conflictividad bancaria vinculada a prácticas abusivas y falta de transparencia por parte de las entidades financieras. En el momento de su creación, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) estimaba que el 50 de Barcelona recibiría entre 400 y 900 demandas relacionadas con cláusulas abusivas, pero transcurrido tan solo un mes y medio desde el inicio de la su actividad, el juzgado ya había recibido más de 2.100 demandas.

Baja tasa de resolución

Esta situación no se solucionó con la asignación de un nuevo magistrado de refuerzo -inicialmente el juzgado tenía asignado dos que pasaron a ser tres- y que se ha repetido en el resto de juzgados especializados. Así, en todo el territorio catalán, la tasa de resolución de asuntos -el cociente entre los casos resueltos y los ingresados y resueltos desde la creación de los juzgados especializados se ha situado en tan solo un 10,1%, el más bajo de entre todas las comunidades autónomas españolas y lejos de la media estatal, situada en un 20,1%.

«Todos sabíamos que esto sucedería -explica Oscar Serrano, abogado de Col·lectiu Ronda- porque estamos hablando de una situación que es endémica en el sistema judicial español. La avalancha de demandas en el ámbito bancario no ha hecho sino llevar hasta el paroxismo los gravísimos problemas de retrasos y falta de recursos humanos y materiales en un país que tiene la ratio de jueces por habitantes más baja de toda la Unión Europea».