Financiación con latidos

GlyCardial Diagnostics ha conseguido 2,4 millones de euros en su primera ronda de inversión. Con ese dinero, la 'spin-off' biotecnológica seguirá trabajando en la investigación para desarrollar una prueba que detecte la isquemia cardíaca (falta de riego sanguíneo) antes de que sea irreversible. Esta afectación, si persiste, podría provocar infartos, anginas en el pecho y otras enfermedades del corazón.

En esos episodios, el tiempo es vital. Los daños en el tejido del corazón empeoran cuanto más tiempo pase el cuerpo sin riego sanguíneo, y existen más probabilidades de que el paciente muera. Sin embargo, en el mercado hay una carencia de herramientas para detectar la isquemia cardíaca inicial.  

«Descubrimos una necesidad médica no cubierta», asegura Judith Cubedo, consejera delegada de GlyCardial Diagnostics. La firma utiliza los resultados de la investigación comenzada hace 10 años en el Institut Català de Ciències Cardiovasculars (ICCC). 

Los científicos descubrieron una proteina, denominada Apo J-Glyc,  que se podía utilizar para diagnosticar la isquemia en fases tempranas. «Utilizamos muestras de sangres de pacientes reales, que sufrieron infartos», explica Cubedo. Prosigue: «En los hospitales siempre realizan una batería de pruebas cuando llegas con dolor de pecho. De ese modo, hemos tenido acceso a extracciones realizadas en fases iniciales de la isquemia cardíaca».

Con esos datos, GlyCardial Diagnostics ha desarrollado un biomarcador innovador. No solo permitirá detectar previamente enfermedades cardiovasculares, sino que también identificará a pacientes con riesgo de reincidencia.

La empresa se constituyó el pasado septiembre por cuatro investigadoras. Una de ellas, Lina Badimon, es la directora del estudio realizado en el ICCC sobre la isquemía cardíaca. Además, actualmente es la vicepresidenta de la Sociedad Europea de Cardiología. «Tenerla como responsable de científica en GlyCardial Diagnostics da mucha credibilidad y relevancia a los resultados que obtenemos» destaca la consejera delegada de la firma.

Las científicas esperan que en unos tres o cuatro años el test esté listo para salir al mercado y utilizarse con un fin médico.  «Este proceso necesita mucha financiación», asegura Cubedo.  La empresa consiguió 2,4 millones de euros, en una ronda liderada por Caixa Capital Risc y en la que también ha participado HealthEquity SCR.

GlyCardial Diagnostics se creo en el marco del programa CaixaImpulse. La iniciativa pretende trasladar los resultados de la investigación básica al mercado en forma de empresas, licencias o servicios.